Por Arturo Navarro

Hablar de  un personaje del lugar es típico en los pueblos y pequeñas ciudades, en donde a ciertas personas se los reconoce e identifica por alguna cualidad o característica física o personal. En nuestra ciudad, en la que por su crecimiento, cada vez son menos a los que se distinguen como personajes, un folclorista a sabido dar trascendencia y continuidad a los personajes de este pago  recordándolos en una canción. 

Hace unos días nos dejo otro a los que considero un personaje digno de destacar, me refiero a Don Julián Díaz, un trabajador gastronómico con una personalidad muy definida, lleno de ocurrencias, dichos y frases que lo diferenciaban de sus pares y lo convierten en un “mozo personaje”. 

Él había trabajado en varios bares y restaurantes de la ciudad, y fue por muchos años el referente en la Hostería de El Rodeo, cuando estaba concesionada al Gallego Molina. 

Todavía suenan en mis oídos la amable frase de “zona desfavorable para  …” cuando debía justificar algún faltante del menú, y  asi lograba sacar una sonrisa al comensal en vez de un reclamo por la falta de lo pedido. Nadie podrá olvidar el “se lo juro” que con su voz grave lanzaba para reafirmar que estaba disponible lo que pedían los comensales.

Seguramente en el Círculo de Obreros quedará un gran vacío y sus compañeros de “loba” ya no escucharán el “proyecta Juliancito” y su típica e inigualable manera de orejear las cartas para ver si le entró la buena.  

Seguramente habrá quien sepa y recuerde mucho más de vos, pero no quería dejar de despedirme con esta líneas como un pequeño homenaje a quien para mí fue un personaje. Dios te tenga a su lado.