Columna de opinión

Periodismo e infancia, un conflicto innecesario

Por Rodrigo Morabito. Juez de Menores y miembro de la Asociación Pensamiento Penal.
lunes, 24 de julio de 2017 01:19
lunes, 24 de julio de 2017 01:19
Recientemente, el programa Periodismo para Todos, que conduce Jorge Lanata, emitió una entrevista en la expuso a un niño bautizado con el alias "El Polaquito”.
Durante la entrevista, el niño comenta que habría cometido toda clase de delitos, incluso asesinatos a tan corta edad, colocando prácticamente (la nota) al niño en una situación de demonio social, el enemigo que hay que combatir y si es posible, eliminar.
¡Cuánta irresponsabilidad de un medio! ¿En busca de qué? ¿Más rating? No lo sabemos; lo que sí podemos decir es que a través de la nota de mención se vulneraron normas que consagran derechos humanos de los niños.
En efecto, en primer lugar, la Convención sobre los Derechos del Niño ha sido muy clara en cuanto a la importante función que cumplen los medios de comunicación en relación a una información responsable que tenga por finalidad promover su bienestar social, espiritual y moral y la salud física y mental de los niños, niñas y adolescentes (art. 17 CDN).
Igualmente, el tratado internacional más ratificado de la historia del mundo señala que "ningún niño será objeto de injerencias arbitrarias o ilegales en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia, ni de ataques ilegales a su honra y a su reputación” y que, a su vez, "el niño tiene derecho a la protección de la ley contra esas injerencias o ataques” (art. 16.1 y 2).
Sin dudas, el niño que fue expuesto ante las cámaras de televisión fue víctima de una injerencia arbitraria que mancilló su dignidad como persona, como sujeto de derechos y el Estado a través de la ley debe brindarle protección.
Y digo brindarle protección, porque además de las normas señaladas anteriormente, existe una ley específica que, a pesar de sus años, conserva plena vigencia; me refiero a la ley 20.056 que "prohíbe la difusión o publicidad por cualquier medio de sucesos referentes a menores de dieciocho (18) años de edad incursos en hechos que la ley califica como delitos o contravención o que sean víctimas de ellos, o cuando por esa difusión o publicidad fuera escuchado o exhibido el menor o se hagan públicos sus antecedentes personales o familiares de manera que pueda ser identificado” (art. 1).
Evidentemente, el programa Periodismo para Todos incurrió en violación a esta norma, ergo, se difundió supuestos sucesos que la ley califica como delito respecto de un niño. Igualmente, por intermedio de esa difusión, el niño fue escuchado y exhibido, haciéndose públicos sus antecedentes personales y siendo claramente identificado.
Entonces, tal y como expresa la norma, el ciclo periodístico debería responder con una sanción de multa que determine un juez o el órgano administrativo de protección integral, además del comiso de los instrumentos donde conste la difusión o publicidad (arts. 2 y 3).
Ahora bien, más allá de las consecuencias legales que deberían haberse suscitado, lo cierto y verdaderamente preocupante es el trato que a diario muchos de los chicos que generalmente pertenecen a los sectores más postergados y en un alto grado de vulnerabilidad social reciben en los medios de comunicación cuando entran en conflicto con la ley penal.
Lo central de la nota no era mostrar las necesidades básicas insatisfechas y la vulneración de los derechos fundamentales del niño, tampoco lo era la falta de contención y amor familiar ni el problema de su deserción escolar; lo medular era mostrar a un niño demonizado, asesino a sangre fría (aun cuando no se probó que realmente hubiese matado), consumidor crónico; en definitiva, a un enemigo social, insisto, al que hay que combatir y eliminar, pero para nada ayudar.
Vivimos en un país en donde entre el 25% y el 32% del total de niñas y niños son pobres. Esto implica un valor que oscila entre 3,3 y 4 millones de niñas y niños; o sea, 6 de cada 10 niños aproximadamente y si bien pobreza no es sinónimo de delincuencia, por experiencia debo advertir que este flagelo unido a otros como la deserción escolar, la falta de contención familiar, el consumo de drogas y la falta de oportunidades pueden llevar a los niños a la comisión de delitos.
No tengo dudas de que el rol de los medios es trascendental para la construcción y fortalecimiento de la democracia y así lograr sociedades más justas y equitativas, sobre todo respecto de aquellos grupos o colectivos en riesgo constante y con mayor grado de vulnerabilidad social como son los niños, evitando arbitrariedades y exponiendo ante la opinión pública la violación a sus derechos humanos fundamentales; sin embargo, los medios (sin generalizar, obvio) están exponiendo a los niños ya no como sujetos de derecho en peligro, sino como sujetos peligrosos, cuando las estadísticas actuales no dejan traslucir esa realidad.

30%
Satisfacción
3%
Esperanza
46%
Bronca
6%
Tristeza
0%
Incertidumbre
13%
Indiferencia

Comentarios

24/7/2017 | 10:34
#149006
viste morabito, ...perdiste..........la gente quiere menos critica y mas accion. haga su tarea, pero completa , salga ala calle y vea y haga algo , no se quede en su despacho. a la casa cuna, a los institutos de menores, a la calle , a los barrios marginales, es fácil hablar, no solo se dedique a los casos que le llegan a su despacho, salga a buscarlos, actue de oficio , ¿ O ACASO NO ES SU TRABAJO?
24/7/2017 | 09:37
#149005
Ahora se dedica a hacer politica moralito? dejese de joder
24/7/2017 | 08:46
#149004
Leyes, leyes y mas leyes que tratan de meterse en la vida de la gente haciéndole mas problemática su existencia y perder de vista el sentido común, el más común de los sentidos. Existe una realidad dolorosa y palpable que afecta a miles de niños en nuestro país sin que los responsables se hagan cargo, se tapa como basura bajo la alfombra y en los casos conocidos, las leyes parece que muy poco resuelven. El Polakito es la cara visible de los invisibilizados. Pienso que sería mas útil pergeñar un plan que proponga revertir la problemática de los niños en situación de abandono o en conflicto con las leyes. Dejemos tranquilo al periodismo que haga su tarea.
24/7/2017 | 08:34
#149003
es fácil decir lo que es legal o ilegal y hablar de los derechos del niño, lo que no dice el juez de menores que la justicia ha dejado pasar este y muchos otros casos por alto, olvidando que es un ser humano a quien el estado y en especial la justicia debía resguardar. que hizo señor donde estuvo usted y muchos jueces?
24/7/2017 | 07:47
#149002
morabito, nosotros tenemos derecho a conocer lo que pasa en el pais. el periodismo no es el reponsable de la situacion de calle de los niños. en cambio, ud sí, ud es juez de menores y no puede desconocer la triste situacion que pasan cientos , sino miles de menores en catamarca a los cuales los vemos a diario semi abandonados en la calle. ud. como juez de menores, debe actuar y no lo hace, sino para criticar a quienes si cumple su funcion. la funcion del periodista es la de informar y mostrar la realidad y la suya es actuar en todos, TODOS, todos los casos en que este comprometida la integridad fisica y moral de un menor . Y UD. NO LO HACE CABALMENTE. Es fácil criticar. Le pido que abandone la critica y pase a la accion. cientos de niños le agradecerán que haga su trabajo y no pieda el tiempo con estas columnas.

Otras Noticias