33 de mano

Por Kelo Molas.
miércoles, 21 de marzo de 2018 00:00
miércoles, 21 de marzo de 2018 00:00

Desde el primer día de este mes comenzaron las inscripciones para los artesanos que quieran participar de la Fiesta Nacional del Poncho 2018, las que se extenderán hasta el 15 de junio próximo. Así lo comunicó la secretaría de Turismo, informando además que el encuentro de las vacaciones de julio se desarrollará desde el 13 al 22 de julio en el Predio Ferial Catamarca. A la hora de entrar en detalles del anuncio oficial y más precisamente en lo referido a los costos de los puestos que ocuparán los expositores,  nos detenemos en una parte en la que alude a los artesanos de Catamarca: “Los precios –de los espacios a ocupar- serán subsidiados por el Gobierno de la Provincia” (textual). Conocida la noticia, la titular de Turismo provincial,  Natalia Ponferrada fue invitada al programa “Estilo K” (Radio Centro-90.5), oportunidad en la que aclaró que “solamente un porcentaje –alrededor del 50%- del valor del espacio será subsidiado por el Estado” en lo que se refiere al sector ocupado por los genuinos artesanos catamarqueños, no descartando la posibilidad de que en el futuro el subsidio del Gobierno cubra la totalidad del costo del stand para los representantes de la artesanía local. Dice un viejo refrán popular: “Persevera y triunfarás”. Es de público conocimiento que el autor de esta columna viene machacando desde hace largos años para que los artesanos de Catamarca no tengan costo alguno al momento de exponer sus artesanías en la convocatoria popular más grande de la Argentina durante el invierno, posición sustentada en un más que sólido argumento: el Poncho nació fundamentalmente para poner en la vidriera grande la riqueza artesanal con la que contamos. En otras palabras: siempre nos pareció una injusticia que los verdaderos dueños del Poncho, los artesanos, tengan que pagar un puesto para ser protagonistas de su propia fiesta. Además de injusto suena a inadmisible. De esta posición puedan dar cuenta los archivos de este diario, como así también los micrófonos de la emisora chacarera. Está claro que no pretendemos arrogarnos propiedad alguna en la decisión de subsidiar parte del precio de los puestos para nuestros artesanos. Queda la íntima satisfacción de pensar que no estábamos equivocados.

///////////

  En honor a la verdad, la determinación de subsidiar un porcentaje del valor de los stands, suena como gusto a poco. Lo ideal sería que la presencia de los artesanos catamarqueños en el Poncho sea totalmente gratuita, porque en honor a ellos se hace la fiesta. Y porque exponen sus trabajos –en muchos casos verdaderas obras de arte- durante 10 jornadas en un promedio de 8 horas por día, lo que al final de la exposición indica que estuvieron “actuando” ¡80 horas! durante el desarrollo del festival, mientras algunos artistas están 20 minutos arriba del escenario mayor –con más y menos méritos- y cobran su platita. Muy poca en algunos casos, generosa en otros. Por eso vamos a insistir: nuestros artesanos no deben ni pueden pagar en la feria artesanal que los tiene que convocar en calidad de homenajeados. Y a los distinguidos no se les pone precio para que estén presentes. Así lo imaginó y lo hizo público uno de los principales hacedores del Poncho: el querido y recordado profesor Federico Raúl Argerich allá por julio de 1967 durante la primera edición de la Fiesta Nacional del Poncho, cuando orgulloso desafiaba a mostrar lo mucho y bueno que los catamarqueños tenemos como patrimonio artesanal. Así lo expresa entre sus considerandos el decreto N° 645 del gobierno provincial dado a conocer el 27 de marzo de 1967: “Que la expresión más excelente del quehacer artesanal está denotada por el poncho catamarqueño”. Así lo expresó el entonces profesor Armando Raúl Bazán en el discurso inaugural del Poncho (5 de julio de 1967): “Aquí están los trabajos y los días del pueblo catamarqueño. Que su valoración nos sirva de estímulo”. Entonces, manos a la obra: a valorar en su justa dimensión y poner las cosas en su lugar  lo que nos legaron los creadores del reconocimiento más grande para nuestros artesanos. Es cuestión de perseverar y en eso estamos.

55%
Satisfacción
22%
Esperanza
11%
Bronca
0%
Tristeza
0%
Incertidumbre
11%
Indiferencia

Comentarios

Otras Noticias