Por Daniela Leiva Seisdedos (*) 

El 25 de mayo de 1810 es asumido como el acontecimiento que dio origen a nuestra patria. Ese nacimiento no fue sencillo. Hubo circunstancias históricas externas que favorecieron esa toma de decisión de formar un gobierno propio, la amenaza de Napoleón recorría Europa.

Pero por estas tierras, no había una unidad de criterio absoluto en qué hacer para gobernarnos mejor y sin depender de España, la idea estaba y eso es el comienzo de ideal de libertad que nos trajo hasta este 25 de mayo.

En estos días se renuevan, de manera muy particular, todos los sentimientos relacionados con el nacimiento de nuestra Nación, se refuerza nuestro fervor ciudadano y se fortalece nuestra identidad histórica. Son esos momentos en los que, de alguna manera, nos sentimos todos más cerca, más argentinos.

La Revolución del 25 de Mayo de 1810 y los patriotas que la impulsaron guardan un mensaje para todos nosotros que mantiene la fuerza de la vigencia y la potencia de la historia: trabajar con honor, responsabilidad y sacrificio por nuestro suelo, por nuestra sociedad, por nuestro presente y por nuestro futuro.

El 25 de mayo de 1810 los habitantes del suelo argentino decidieron elegir una patria libre.
La patria es un pedazo de vida que está en todos lados, en mi casa junto a mi familia, en este lugar tan especial que nos toca vivir este año en nuestro país que volvemos a votar, donde cada uno de nosotros hace la patria, desde su lugar de trabajo, de estudio, de ocio.

Cuando nos viene a la mente el significado de gesta emancipadora de la independencia, automáticamente la relacionamos con los conceptos de patria, de nacimiento y de libertad. Hoy en día pareciera olvidado todo este sentimiento y todo lo realizado no se toma en cuenta. Deberíamos día a día concientizarnos en el sentido de lo nacional.

En este sentido decía Moreno “El pueblo no debe contentarse con que seamos justos, sino que debe tratar de que lo seamos ferozmente. Porque defender lo de todos es defender lo nuestro”.
Actualmente se denota en nuestra sociedad un gran sentimiento antipatriótico y de desapego de lo cultural, lo cual tiene como consecuente una pérdida de identidad para las generaciones presentes y futuras.

Necesitamos saber “de dónde venimos para saber hacia dónde vamos” para poder proyectarnos ante el mundo y que el origen y la historia de nuestro país no queden en el olvido, para así poder crecer como sociedad, y en el futuro ser mejores personas para tener un mejor país. Y que este día no sea sólo un recuerdo o un feriado más o un día en que no venimos a clases, tampoco es el ideal de un gobierno, la patria es de todos.

Porque la patria es nuestros abuelos que trabajaron fuerte y duro para formar este suelo y hoy cuentan historias sencillas que guardan en su memoria.

Quiero decirte que la patria sos vos, soy yo, somos todos, pero a esta patria se la siente, se la quiere y se la cuida. Como la sintieron, la quisieron y la cuidaron aquellos hombres que decidieron y eligieron vivir en suelo libre, madurando esa idea y haciéndola realidad dentro del cabildo, no sólo siguiendo un impulso sino una convicción. Y gracias a aquellos hombres sensatos y ambiciosos, nosotros recibimos como legado. Pero... pensemos por un minuto ¿qué es la libertad hoy en día? la libertad no es un instrumento; es una forma de vida. Para que realmente respetemos a los hombres de mayo.

Es la posibilidad de elegir, de obrar con franqueza, es la opción que cada uno tiene de actuar conforme a lo que siente respetando y valorando a mi próximo, es un valor permanente que debe renacer en cada uno de nuestros actos y no recordarlo en cada fecha patria.
Entonces, tratemos de ser grandes por dentro, para interpretar el compromiso de habitantes primeros para ser luego ciudadanos responsables, que habitan este suelo tan rico en valores y riquezas naturales.

A esta altura, a nivel local, nacional tenemos que volver a los valores de los padres fundadores de nuestra paria, con el respaldo y el esfuerzo de toda la comunidad no sólo lo educativo, tenemos que poder hablar de avances concretos pensando siempre en el mañana no en el hoy, hablar de una verdadera comunidad de todos los argentinos, tenemos que ser protagonistas de un proceso de transformación permanente tomando como base a la educación.
Una sociedad como un individuo, avanza a partir de sus concreciones que se tienen en la educación, porque la educación no sólo está en la escuela, con ella sueños de un país mejor para todos.

Los próceres de Mayo tuvieron un sueño y lo llevaron adelante, yo los invito a todos ustedes a compartir un proyecto de educación para todos y esforzarnos para hacerlo realidad en el respeto y el progreso. Ese sería nuestro aporte más importante en lo que es la construcción permanente de un país para vivir todos.

(*) Profesora de Historia.