Luego de tres triunfos de manera consecutiva entre el campeonato y la Copa Libertadores, a Gallardo lo que más lo entusiasma es que su equipo, además de ganar, empieza dar síntomas positivos en cuanto al juego. Hay, podría decirse, una sensación de recuperación.

Y siguió: "Con Belgrano teníamos que confirmar el rendimiento en nuestra cancha, ante un equipo duro, de oficio. Y lo conseguimos. Jugamos en una cancha que estaba bastante fea y sin embargo hubo cosas positivas. Eso es para rescatar. Me voy contento porque fueron tres partidos seguidos que ganamos, pero, insisto, jugando bastante bien”.

Sin Lucas Alario, quien fue convocado a la selección, River afrontó un duelo particular.

 

Aunque tiene varios jugadores que pueden marcar la diferencia, la ausencia del atacante resultó todo un desafío.

"Su convocatoria nos tomó un poco por sorpresa. Pero asumimos muy bien su citación y no pusimos excusas. Y jugamos. Siempre dije que prefería jugar. Con esa dificultad afrontamos este partido”, reconoció Gallardo, quien también se mostró molesto por cómo se manejaron muchos de los clubes argentinos a la hora de ceder a sus jugadores al conjunto de Bauza: "No me sorprende nada de lo que está pasando últimamente. Soy bastante crítico. Si me hubiera quejado antes, si hubiera especulado, tal vez no lo habrían convocado (a Alario)”.