El pasado 10 de agosto se presentó CocinAR, un plan estratégico de la Cocina Argentina lanzado desde el ministerio de Turismo de la Nación, que tiene como objetivo revalorizar el patrimonio cultural-gastronómico de nuestro país y posicionar la cocina argentina a nivel internacional.

En junio del año pasado, la secretaría de Cultura de Catamarca había anunciado una serie de acciones tendientes a promover e instaurar el 1er domingo del invierno como Día de la Cocina Tradicional Catamarqueña. "El objetivo central es que en cada rincón de la provincia, en cada restorán y bar de Catamarca y en cada mesa familiar se promueva el rescate, elaboración y consumo de comida tradicional como una forma de reconocernos -a través de los aromas y sabores- como catamarqueños”, expresaron en aquella oportunidad desde ese organismo.

Aunque este año no se dio continuidad a esa propuesta local, la iniciativa formó parte de una tendencia que se dio también en otras provincias que venían mostrando sus atractivos culinarios, pero no había hasta ahora un plan que definiera una estrategia a nivel nacional. Ahora, en el marco del plan nacional "CocinAR, diversos actores públicos y privados participaron del Foro de Planificación y Desarrollo Turístico Gastronómico” en Catamarca para elaborar el Mapa del Turismo Gastronómico de la provincia y de la Argentina.

En las conclusiones de este primer encuentro se puso énfasis en que Catamarca "cuenta con un patrimonio gastronómico diverso e identitario de las culturas originarias locales e inmigrantes”. Y se destacó la importancia de fortalecer proyectos en marcha, como la fábrica de charqui de Isla Larga, Ambato, o implementar una "Ruta de la Nuez”. También se propuso un centro de interpretación de "aromas y sabores” y la promoción de la cocina solar en la Puna catamarqueña. Y hubo varias iniciativas más.

Además de la revalorización de ingredientes y recetas de cocina que forman parte de un acervo cultural varias veces centenario, la propuesta puede darle un nuevo impulso a las economías regionales por el consumo de productos autóctonos, el incremento del turismo, además del afianzamiento de nuestra identidad y nuestra historia.