El Secretario

miércoles, 18 de octubre de 2017 00:00
miércoles, 18 de octubre de 2017 00:00

La vuelta de las actividades luego del feriado del lunes significó también la reacción del oficialismo tras el durísimo revés vivido el domingo en las elecciones de Ancasti. Sin tiempo para pases de facturas y apurados por los cierres de campaña y la inminencia de las legislativas, referentes del FPV - PJ, sin restarle importancia a lo sucedido, no dejaron de señalar el carácter local del comicio y se mostraron confiados en mantener y hasta en acrecentar la diferencia conseguida en las PASO. Así lo expresó, entre otros, el ministro de Gobierno y principal candidato del oficialismo, Gustavo Saadi. Conscientes del “efecto Ancasti”, no obstante, más allá de los discursos de circunstancia, en el Gobierno activaron una suerte de “comité de crisis” para contener la situación y buscar, a través de la unidad del peronismo ancasteño, que el concejal y senador del departamento queden para el oficialismo el próximo domingo. 
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En principio, las gestiones habrían tenido un avance veloz y favorable. El concejal Roberto Arroyo, quien por la mañana había disparado fuertes cuestionamientos que hicieron foco, entre otros, en el senador Aldo Contreras -su rival en las Primarias-, dijo sin rodeos que estaba esperando “una llamada”. Ésta -aparentemente- no se hizo esperar, porque por la tarde, en un parte de prensa difundido desde el Partido Justicialista, el edil “reconoció” que “hay que dejar de lado los enojos y hacer un mea culpa”, y a renglón seguido aseguró que el peronismo de Ancasti trabajará unido y que tendrán su esperada revancha.
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Por este motivo, la modesta jurisdicción del Este catamarqueño, con sus escasos 3.000 electores, volverá a ser, dentro de cuatro días, escenario de una disputa de alto contenido simbólico y por ello, motivo de atención para toda la provincia. Si como dijo el senador Oscar Castillo, lo del 15 fue “el principio del cambio”, los radicales deberían sonreír de nuevo. Si es lo opuesto, se demostraría que el resultado adverso fue más una cuestión de candidatos errados o de disputas coyunturales en el justicialismo local, que de la fuerza electoral opositora.n
 

25%
Satisfacción
0%
Esperanza
62%
Bronca
0%
Tristeza
0%
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Indiferencia

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