La caída de la Policía

martes, 12 de diciembre de 2017 00:01
martes, 12 de diciembre de 2017 00:01

Que la Policía de la provincia exhibe desde el último recambio de cúpula un lento y constante descenso hacia inéditas formas de desacreditarse a sí misma no es una novedad que amerite más críticas de las que ya se han vertido. La inmunidad a ellas por parte de las autoridades hacen de las observaciones y los llamados de atención meros espasmos inocuos. 
La violencia claramente manifiesta de los hechos de inseguridad más “noveles” con modalidades insólitas, la cantidad de hechos de sangre en los que mujeres ya víctimas de violencia de género son víctimas de formas de violencia mortal, las estadísticas por siniestros viales fatales o con heridos de gravedad; ninguno es directamente atribuible a las fuerzas de seguridad. Por el contrario, especialmente la Policía provincial, tiene en apariencia problemas más graves con los que lidiar: el principal es ella misma, no ya como espacio de revueltas u operaciones para acceder a la cúpula, sino -por el contrario- como concepto general para atacar problemáticas sociales relacionadas con el delito. 
No ataca debidamente el fenómeno de la inseguridad porque debe mantenerse en constante e interminable guardia para que los nuevos efectivos policiales -esa generación en la que una alarmante mayoría ha encontrado una forma alternativa del empleo público, más un arma de fuego- no empiecen a hacer lo que les da la gana con la certeza de la impunidad que genera el no expulsarlos para siempre de la fuerza, sino moverlos de repartición o jurisdicción. 
No es lo mismo una suerte de pereza o vagancia que caracteriza a un largo sector del empleariado público al extraviar un expediente, que la vagancia para perseguir a un delincuente en los términos que demanda la ley, aunque al mismísimo secretario no le guste tener que acatarla y se la enrostre a los jueces para generar más confusión. 
No es lo mismo, si de errores hablamos, la equivocación bastante extendida de perder un expediente o una notificación, que no saber empuñar un arma o descerrajar un disparo sobre una persona sobre la cual apenas hay una certeza de culpabilidad, aparte de las que gratuitamente puede generar la Policía misma al enviar perejiles a manos de un fiscal. 
Como en toda la sociedad, la clave parece ser la educación para llegar a un trabajo formal que requiere una dedicación y vocación de servicio muy especial.

13%
Satisfacción
0%
Esperanza
50%
Bronca
13%
Tristeza
4%
Incertidumbre
18%
Indiferencia

Comentarios

12/12/2017 | 14:48
#149006
Lamentable, siguen haciendo tiros al aire y pegandole a inocentes. Como si hoy opinar sobre un tema cualquiera fuese exclusivo de alguien iluminado en particular. Cada uno ve la situación de acuerdo a la amplitud de su mente y se ve que estoy errado o los medios dicen mentiras, cuando hablan de apremios, violencia, violencia en la familia policial, falta de instrucción elemental que causó la muerte a un joven, otros homicidios,procesados, que hay drogas como nunca antes, es largo los bochornos. Desde la calle se ve otra cosa diferente. Mucha gente sin ser delincuente no los quieren. Hace falta un baño de humildad y dedicarse a trabajar con seriedad. Lo digo de buena onda.
12/12/2017 | 13:26
#149005
El que escribe como Agente Juan Perez es uno de los ex policías que pasaron por la Fuerza y fueron unos inútiles. Cuando una Policiía se siente ACREDITADA Y FUERTE (como ahora) funciona para todos. Se acabaron las jodas, los narcos, los delincuentes, los criminales. Pero LOS QUE SE FUERON siempre pensarán que ahora se ahce mal. SON ENVIDIOSOS. Salvo en la época de la Policía de los Aguirre NUNCA UNA POLICÍA ESTUVO MÁS ACREDITADA QUE AGORA. No jodan. Gutiérrez no funcionó y los otros menos. Fueron. Ahora llegó la hora de la seriedad.
12/12/2017 | 12:49
#149004
¿QUIEN ESCRIBE ÉSTO? ¿EL EX JEFE QUE NADA HIZO CONTRA LOS NARCOS? Yo veo a la Policía de Catamarca cada vez más firme en sus procedimientos y más ACREDITADA EN LA COMUNIDAD. Y en la propia Policía. Ahora saben QUE EL QUE SE PORTA MAL - por decirlo de algún modo- LO SACAN DEL SERVICIO E INVESTIGAN EL CASO. Si es culpable, se le da de baja y si no lo es, vuelve a su puesto.
12/12/2017 | 12:30
#149003
Creo que todo pasa por una cuestión que se repite en todos los ámbitos de nuestra sociedad actual, que es la falta de educación. Y no me refiero a la instrucción que se da en las escuelas, que también es muy importante, sino a la adquisición de valores, de buenas conductas, aspectos estos que se adquieren en el seno de las buenas familias. Y acá está el problema más grande y grave. Hay pocas buenas familias. Con mandar a los hijos a la escuela, no alcanza. Con darles de comer no se alimentan los buenos hábitos. Hace falta los buenos ejemplos de los padres, el respeto, la honestidad, la moral intachable. Una persona íntegra, formada en un hogar con disciplina, donde los padres no sean ni amigos ni compinches, sino PADRES, podrá ser tanto policía, como médico, como bancario, albañil, plomero o docente, y siempre será una persona de bien, por lo tanto sus actos serán irreprochables.
12/12/2017 | 11:49
#149002
Se dice por ahí que la Seguridad pública es básica para que toda sociedad pueda desarrollarse en paz y tranquilidad, es la policía su cara visible y actúa dentro de la ley que regula sus obligaciones y deberes en un estado de derecho. Dice el escribiente que la educación es principal forma de tener un hombre policía que responda a lo que se aspira, un policía profesional, sin lugar a duda lo es, pero no la única, conocimientos intelectuales, práctica, habilidades, destrezas y saberes enmarcadas en principios éticos y morales. El quiebre se produce con la sanción de la Ley de Seguridad, cuyo Secretario pasa a conducir una institución militarizada sin estar preparado ni asesorarse debidamente y le está causando daños irreparables. El Jefe de Policía tiene un papel secundario. No se respeta la ley, hay indisciplina, los mandos relajados y la mayor aspiración es retirarse con zona y vivienda para duplicar sus haberes.Hay muchos hombres y mujeres que realmente tienen vocación de servicio y se encuentran en una situación de violencia moral. ¿Quien se hace cargo?
12/12/2017 | 11:26
#149001
Al parecer cualquiera es policía. No hay exigencias serias, los exámenes son similares a los del nivel secundario. No tiene profesionalización, por eso los delincuentes pueden vestir sus uniformes, transitar los escalones del poder y llegar a ser las máximas autoridades de la fuerza e incluso retirarse para continuar con sus fechorías. Excepto honradas excepciones (todos los que no se corrompen). Lamentablemente cuando no sacan a los malos no se pueden distinguir a los buenos. El trabajo de limpieza es suyo muchachos. Saquen a los delincuentes de la fuerza!
12/12/2017 | 10:43
#149000
El problema de la policia no es LA POLICIA. es del gobierno de la provincia. Si no hay una decicion politica de ponerla a la altura de las necesidades de la sociedad no hay solucion. Todo lo que se concidera un gasto y no una inversio va en desmedro de una institucion de calidad.

Otras Noticias