Una vez más, no hay buenos auspicios por parte de algunos representantes del sector privado con respecto a la temporada vacacional de invierno y el impacto que ella tendrá en el movimiento principalmente económico de Catamarca durante ese breve período de apenas dos semanas. 

Se dice algunos, porque no todo el abanico del sector implicado en estos casos -el hotelero, para ser más puntuales- tiene o exhibe el mismo grado de pesimismo a la hora de hacer una lectura a futuro de lo que será la temporada invernal o estival. 

Esta ambivalencia viene a colocar sobre el tapete una discusión que seguro tendrá provecho para las autoridades y para el público que en gran medida escucha y depende de los datos y predicciones que se realizan. 

Por un lado, hay un sector que muestra un constante viento en popa -a pesar de algunas críticas puntuales que se intenta subsanar con un jovial optimismo- y por otro lado se vuelcan críticas que buscan ser constructivas pero no siempre vienen acompañadas de propuestas concretas.

El centro de la cuestión gira sobre todo en torno a los datos empíricos que se usan para soltar elogios o para gritar problemas.

 

Esos datos -la capacidad hotelera, para poner un ejemplo- se pretenden certeros solo por estar en boca de quienes están empacados en el día a día del trabajo mismo.

 

Sin embargo, no se podrán negar los rasgos positivos de transparentar esa información de cara al público y de cara al periodismo que suele recopilar para contrastar y subrayar o remarcar situaciones.

En vez de contar con aproximaciones o estimados que pueden hacer era variar el tenor de una información o el perfil con el que la opinión pública mirara esos datos, quizás sería más sano directamente optar por un método en el que no tuvieran injerencia ni las autoridades ni los representantes circunstanciales. 

Una mirada objetiva, sin las ópticas coloreadas o grisadas que uno y otro lado seguramente le brindarán al público y al comerciante un verdadero mapeo del lugar en el que se estaba, al que se llegó, y una idea precisa de qué medidas tomar para decidir hacia dónde ir.