Ayer la Policía de la provincia realizó la presentación de un nuevo sitio web que tendrá, entre otras herramientas estelares, una posibilidad de tramitación que de seguro será recibida con beneplácito por mucho más de un vecino que debía "comerse” con paciencia y buen humor filas y filas en el peor horario para un catamarqueño.
Es una buena noticia que, merced a otros estamentos que también realizan un denodado acompañamiento técnico y de asesoramiento, la Policía empiece a dotar a sus oficinas de una mayor agilidad procedimental de cara al público.
Quizás podrán objetarse otros aspectos a la Policía y sus tareas esenciales, pero esta sin dudas no será una novedad menor que sienta las bases para un mayor entendimiento con la gente.
El nuevo sitio web -atento todo el mundo- va a permitir sacar el turno para la realización del certificado de antecedentes en forma digitalizada y sin tener que hacer la ya tradicional cola sobre calle Tucumán para obtener uno de los escasos lugares disponibles en forma diaria para acceder a este servicio requerido por la mayoría de los estamentos administrativos, y quizás por algún empleador un tanto desconfiado.
Este avance, más allá de ser un puntapié en la fuerza de seguridad, se suma a la oleada digitalizante de los organismos públicos que buscan descentralizara y descongestionar las oficinas donde se deben realizar tramitaciones claves. La Provincia, según se anunció en su momento desde la subsecretaría de Tecnologías de la Información, buscará tener más de un centenar de trámites online para evitar largas esperas o malas interpretaciones ante los responsables administrativos.
El municipio de la Capital -amén de una cantidad de trámites generales a los que se puede acceder vía su página web- llegó incluso a tomar la decisión ordenadora de digitalizar el pedido de turnos para subirse a dar una vuelta en la calesita del paseo General Navarro.
Lo único que resta ahora es que la ciudadanía finalmente empiece a adaptarse a las nuevas herramientas que se ponen a disposición general para hacer las cosas más sencillas y ordenadas.