Apicultura
Hoy es el Día del Apicultor, un oficio que se ha desarrollado durante milenios y que también está presente en Catamarca.
La apicultura consiste en criar cuidadosamente abejas, para obtener, comercializar y consumir los productos que son capaces de elaborar y recolectar, comenzando naturalmente por la miel.
Se trata de una actividad importante por las posibilidades que ofrece como alternativa productiva, por una serie de factores que no siempre se encuentra en otros campos.
En diferentes países se promocionó la apicultura para batallar contra la pobreza, especialmente en zonas rurales, porque es posible desarrollarla con bajos niveles de inversión y como beneficio agregado permite que el productor trabaje sin necesidad de ser el dueño de las tierras.
Catamarca tiene zonas fito-geográficas que son óptimas para el desarrollo de la apicultura, si se consideran las especies de bosques nativos como el algarrobo, el mistol, la jarilla y muchas otras.
Lo que se necesita es brindar conocimientos técnicos y fortalecer a quienes participen en la actividad, con un esquema claro de objetivos que podría comenzar con el consumo local para luego dar paso a la comercialización.
La venta de miel y otros subproductos estuvo alguna vez en la mira de áreas oficiales, pero no todos los programas propuestos llegaron a consolidarse.
Quizás pueda revisarse esa oportunidad, en momentos en que la generación de recursos desvela a muchos sectores del interior provincial.