PJ, modelo para armar

Con unas pocas excepciones como Catamarca, donde ganó las elecciones de manera contundente y retuvo el poder, el peronismo viene de un 2023 similar a una pesadilla. En una de las peores elecciones de su historia, el PJ no sólo perdió la Casa Rosada, sino también provincias como Santa Fe, Entre Ríos, Chaco, Santa Cruz, San Luis, San Juan y Chubut, algunas de ellas históricos bastiones de la fuerza. Y perdió también su conducción, como que todavía tiene como presidente del partido a Alberto Fernández, un presidente de tan pobre gestión que ni siquiera pudo competir por la reelección. Virtualmente acéfalo y dividido, el histórico movimiento próximo a cumplir 80 años de vida institucional, transita además los recorridos propios de la post caída, esto es, acusaciones, rencores y escisiones de todos los colores; alimentadas a su vez por ambiciones personales y sectoriales de quienes vislumbran en el evidente vacío de liderazgos la oportunidad de posicionarse. Todo, para completar, en un país que se hunde en una de las peores crisis económicas de las últimas décadas.

Barajar y dar de nuevo

Queda claro que no se puede seguir así, menos cuando gran parte de la sociedad reclama la reacción opositora ante los desmanejos de un Javier Milei que arrasa con el poder adquisitivo de la clase trabajadora, desafía la división de poderes, goza con la confrontación permanente y se muestra dispuesto a poner el cartel de remate al país entero. Para iniciar la reconstrucción el primer paso se dará el próximo viernes, cuando se reúna el máximo órgano partidario, el Congreso Nacional. Allí, se descuenta que como primer paso se pondrá formalmente fin a la presidencia de Alberto (quizás con formato de licencia), y se dará las riendas del partido quizás al conjunto de vicepresidentes, entre los cuales está Lucía Corpacci, junto con Axel Kicillof, Juan Manzur, Cristina Alvarez Rodríguez y Analía Rauch Quiroga. Pero el momento no admite interinatos, y es por eso que urge definir un conductor y líder real lo más rápido posible. La dedocracia, que no ha funcionado casi nunca, tampoco dio buenos resultados en el peronismo, y es por ello que la idea mayoritaria es llamar a verdaderas elecciones internas, y promover allí la participación de todos (pero todos) los sectores. Kirchneristas y antikirchneristas. Quieren que se sumen sindicalistas rebeldes, díscolos, los exiliados y autoexiliados, incluyendo a figuras como el cordobés Martín Llaryora, Miguel Ángel Pichetto, Guillermo Moreno, Juan Manuel Urtubey y otros que andan con pequeños partidos propios. La negociación no será fácil. Gobernadores, legisladores e intendentes jugarán sus fichas. Pero el clima que se respira es que nadie contará con respaldo masivo y real si no se impone en una interna. Serán horas cruciales para el sector político con más afiliados del país, que se apura a reconstruirse pensando en 2025 y 2027, pero también para eventualidades inmediatas.

Intendentes unidos

Con poca repercusión, en un hecho que quedó relegado ante la vertiginosa sucesión de noticias de la última semana -caída del DNU en el Senado incluida-, comenzó a gestarse un nuevo bloque para intentar hacerle frente a la Casa Rosada. Lo interesante de este grupo que se está armando, es que resulta transversal a los diferentes colores políticos, y busca reunir a los intendentes de todas las capitales del país, sin importar a qué partido pertenezcan. Ya hubo un plenario preliminar en Córdoba, con el mediterráneo Daniel Passerini como anfitrión en el Palacio 6 de Julio de “La Docta”. Allí se analizó la crisis de Rosario, y un tema se encadenó con otro hasta que decidieron reunirse todos en abril, precisamente en Rosario. Quieren abordar una agenda propia y hacer una puesta en común de las problemáticas que afrontan por la pérdida de recursos. En conjunto, reclamaron ser recibidos por el ministro del Interior, Guillermo Francos, a fin de manifestar sus inquietudes ante Nación. Si prospera, este bloque suprapartidario podría abrir un canal con Casa Rosada sin pasar por los gobernadores. De este primer encuentro participaron Armando Molina (La Rioja); Daniel Passerini (Córdoba); Emilio Durand (Salta); Emilio Lanari (Corrientes); Jorge Jofre (Formosa); Juan Manuel Llamosas (Río Cuarto); Juan Pablo Poletti (Santa Fe); Julio Alak (La Plata); Luciano Di Nápoli (Santa Rosa); Marcos Castro (Viedman); Mariano Gaido (Neuquén); Pablo Grasso (Río Gallegos); Raúl Jorge (San Salvador de Jujuy); Rosario Romero (Paraná); Rossana Chahla (San Miguel de Tucumán); Susana Laciar (San Juan); Ulpiano Suarez (Mendoza); Walter Cortes (Bariloche) y el catamarqueño Gustavo Saadi, por San Fernando del Valle de Catamarca.

El Esquiú.com