Se dieron muchas vueltas para definir el día y la sede del clásico rosarino que se disputará por los cuartos de final de la Copa Argentina. Pero finalmente quedó establecido que será el 1° de noviembre, en la cancha de Arsenal de Sarandí, y a puertas cerradas. El peor final.
Lejos de Rosario y sin público, el clásico entre Newell's y Rosario Central será atípico. Este lunes la APreViDe resolvió que el partido se disputará a puertas cerradas y martilló el último clavo al deseo de los hinchas de vivir un nuevo clásico.

Primero fue la fecha, se pensaba en el 7 de noviembre y hasta coquetearon con la idea de sortear la localía ante un escribano público. Pero después los organizadores de la Copa Argentina establecieron que debía jugarse el 1° de noviembre. Pero si era en Rosario, no se podía hacer en la cancha de Central por un recital de la colombiana Shakira, que se presentará el 27 de octubre y no había tiempo para desarmar el escenario.
Además, el Gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, se sacó de encima el problema y dijo que "el clásico rosarino no se jugará en la provincia, ya que no existen garantías para que el encuentro se dispute con ambas parcialidades". La pelota se la tiraron otra vez a Buenos Aires y la cancha de Lanús parecía el escenario ideal para el partido. Volvieron a cambiar.
Entonces cortaron el hilo por lo más delgado: va en Arsenal y sin gente. la Agencia de Prevención contra la Violencia en el Deporte tampoco quiere dolores de cabeza. El clásico de Rosario tendrá un candado.