Los gobiernos provincial y municipal celebraron ayer sendos actos en conmemoración del 39° aniversario del golpe de Estado que inició el 24 de marzo de 1976 con el denominado Proceso de Reorganización Militar, encabezado por la Junta Militar.

Por la noche, el gobierno provincial, encabezado por Lucía Corpacci, llevó a cabo su acto en el Centro Administrativo del Poder Ejecutivo (CAPE).

Antes, la Municipalidad de la Capital inauguró el Jardín de la Memoria, auspiciado por la Casa de la Memoria y con la participación de organismos de Derechos Humanos.

“Si uno mira el tiempo histórico, no ha pasado mucho desde el Holocausto a esta fecha. Después de las Guerras Mundiales nadie se podía haber imaginado que se produjera semejante guerra interna. Que los chicos no puedan entender que esa demencia ocurrió, por eso tenemos que mantener viva la memoria. No por los que murieron, sino porque la amenaza de los motivos por los que ellos murieron sigue intacta, con otros interlocutores, en forma más civilizada, pero la discusión sigue siendo la misma. Exclusión, pobreza, indigencia, nunca más”, dijo el vicegobernador Dalmacio Mera en su alocución durante el acto.

Del acto también participó el presidente del Concejo Deliberante de la Capital, Víctor Rodríguez, a cargo de la intendencia. “La palabra memoria ha sido la que ha reflejado este día, y debe reflejar que no debemos olvidar nuestra historia para que el pasado no se vuelva a repetir en el futuro”, expresó el edil.

También ofrecieron su palabra algunos de los familiares de las víctimas que participaron del acto, como el caso de Eduardo Álvarez, hermano de Manuel Antonio Álvarez, uno de los 19 desaparecidos denunciados en Catamarca. “Aquí hay que dar nombres, como el de (el exgobernador) Arnoldo Castillo, quien se desafilió de la Unión Cívica Radical (UCR) para ser uno de los referentes de la dictadura militar en la provincia. Igual pasó con (Amado David) Quintar en Fiambalá, con Acevedo en Andalgalá, y otros supuestos dirigentes que luego, merced a la memoria frágil de los catamarqueños, se hicieron votar en democracia, cuando ellos fueron enemigos de la democracia al trabajar al servicio de los genocidas”, dijo.

Además, se llevó a cabo la “Vigilia de la Memoria” en la “Casa de la Memoria” de calle 9 de Julio 1276. En ese domicilio vivían Francisco Gregorio Ponce, secuestrado el 6 de abril de 1976 y luego desaparecido, Griselda del Huerto Ponce y Julio Gerardo Burgos, también secuestrados y desaparecidos. Referentes del Partido Intransigente (PI) participaron junto a referentes y militantes de distintos partidos políticos y organizaciones sociales.