Según informó, de 9 a 10 y de 19 a 21 en la plaza 25 de Mayo se entregarán folletos.

"Fue un año muy  particular; recién empezamos a ver algunos avances después de tantos años de lucha. Empezó a salir reflejada toda la lucha, incluso a nivel nacional. Tuvimos más apoyo del Gobierno actual, porque el director de Derechos Humanos, ni bien empezó a trabajar el año pasado, se puso en contacto con nosotros. Él sabe de mi lucha y nuestro esfuerzo. Además, tenemos abogados profesionales que nos acompañan, porque desde el principio nos tocó ir a luchar con esta Justicia, que para mí no tiene nombre. Si la tengo que nombrar me salen sólo palabras feas, porque yo ya no confío en ellos, ya que  son los primeros que empezaron a trabar la causa”, expresó, agregando que "hicimos un pedido de querella, que no fue aceptado, porque nos dijeron que van a archivar la causa. La verdad, no sé qué van a archivar porque nunca hicieron nada y no trabajaron ninguna de las hipótesis”, se quejó.

"Son 13 años ya. Sin saber nada de nada por parte de la Justicia”, remarcó.

 

Azucena relató que la familia tiene serias sospechas sobre un hombre que trabajaba con Alicia y que luego fue condenado por asesinar a su mujer, pero que nunca se investigó esta posibilidad.

"El fiscal directamente me rechazó la  denuncia contra este hombre. Yo no sé por qué sucede esto, si se trata de un psicópata. Y quedó demostrado lo que es capaz de hacer en 2006, cuando fue condenado por la muerte de su mujer. También quisiera que la Justicia haga algo, porque él ya está saliendo con beneficios y es una persona peligrosa”.

Azucena recordó que su hermana salió de trabajar de la fábrica Camino (actualmente Canale) el  21 de enero de 2004 y nunca más fue vista.

 

"Ella era bromatóloga y llegó como todos los días a las 5 de la mañana y terminaba de trabajar a las 7, pero ese día  se retiró a las 4 diciendo que tenía que hacer un trámite para la vivienda. Pidió permiso y se fue. No se sabe más nada y  nunca se la vio pasar más allá del puente”, explicó. "Para la Justicia, desapareció de la faz de la tierra”.

Mi papá fue a hacer la denuncia inmediatamente, pero recién  se la tomaron el 22 a las 11 de la mañana, después de mucho insistir.

 

En un primer momento, la policía no le dio bolilla. Cuando lo pienso, me doy cuenta de que en ese momento estaban muy mal los pasos que se daban en casos como éste, ahora creo que eso mejoró. Pero fue desubicada la manera en que trabajaron; porque se trataba de la vida de una persona y las horas cuentan, y mucho. En ese momento ni nos imaginamos que no la íbamos a poder ver nunca más y abrazarla, eso era impensable”.

"Nosotros creemos solamente en la justicia divina, porque la de los hombres, sentimos que no nos respondió. Por eso estamos haciendo una campaña de difusión para recordar su caso y hacer ver que la Justicia no es honesta como tiene que ser. Vamos a repartir folletos contando lo que le sucedió y para que no vuelva a repetirse un caso así en Catamarca”, finalizó.