Ayer, luego del vencimiento de los plazos de la sentencia que destituyó al fiscal Roberto Mazzucco, la defensa, como era de esperar, presentó el recurso de casación ante el máximo órgano de justicia de la provincia.
Dentro de las consideraciones por la cuales José Furque, el abogdo del extitular de la fiscalía Nº 9, puso énfasis en la nulidad absoluta del debate, criticó otras cuestiones que hacen al apartamiento del funcionario, que se habría basado en pruebas totalmente arbitrarias manipuladas a favor del fallo por parte del tribunal de Enjuiciamiento.
En este sentido, se aclararon dichos de testigos que no fueron tales, como hace mención la mayoría de los jueces en sus fundamentos.
Cabe aclarar que la defensa considera en su instrumento que el proceso es nulo, por tratarse de un proceso caduco. Para ella, desde el punto de inicio, se encuentran ante la violación del derecho de defensa y el debido proceso.
El defensor también señaló que la Corte de Justicia se excedió en sus facultades al iniciar una investigación interjurisdiccional que en forma clara le correspondía al juez de Control de Garantías. Por ende, acusó a la Corte de brindar apoyo a los testigos que difamaron al exfiscal Mazzucco, por cuanto contaban con el respaldo de la Corte, para evitar que a pesar de estar presentes ante la comisión del delito de cohecho pasivo, no se les haya advertido que lo que declararan podía ser usado en su contra, como sí ocurrió con el fiscal Víctor Figueroa, según puntualizó Furque.
Por otro lado, desde la defensa se cuestionó fuertemente la actuación de José Cáceres (ministro de la Corte), que dio curso al sumario en contra de Mazzucco, cuando se sabía que ellos dos tenían una enemistad manifiesta.
Al mismo tiempo, Furque dijo en la presentación que el fiscal Gustavo Bergesio no actuó con la imparcialidad que se requiere para garantizar el debido proceso, puesto que ya había actuado en una causa en la que, a través de un sumario, se le aplicó una multa al exfiscal por haber hecho entrega de un camión en la época de feria.
Cabe destacar que por esta causa, el fiscal fue absuelto, ya que carecía de sustento, según el tribunal de Enjuiciamiento, por unanimidad.
 En cuanto a los hechos por los cuales el tribunal consideró destituir a Mazzucco, la defensa se limitó a resaltar el voto del senador Oscar Vera, quien falló a favor de la absolución del acusado.
Para esto Furque se refirió a los puntos en los que Vera resalta que, de acuerdo a las reglas del debido proceso, los alegatos del fiscal son totalmente nulos, ya que habría omitido referirse a la conducta indebida del imputado, como así también en la calificación legal que le corresponde.
Todo ello, sin perjuicio de que el vocal del tribunal considere que las declaraciones testimoniales carecían de credibilidad suficiente para ser razón de destitución, toda vez que existían serias contradicciones entre los mismos denunciantes.
Con respecto a la investigación en contra del ex funcionario judicial, el letrado en su escrito remarcó que es inaudito considerar una ley de Jury por sobre la propia Constitución Nacional, ya que el fallo no se basó en pruebas concretas, sino más bien en dichos de personas que se autoincriminaban en delitos "mínimos, de cohecho pasivo”, pero que al estar apoyados desde la Corte, estas investigaciones jamás se iniciaron.
Al respecto, Furque señala que el máximo tribunal no sólo realizó la investigación preliminar desde la Corte, lo cual no debería suceder, sino que además envió funcionarios para que tomaran denuncias en la localidad de Los Altos.
Amén de ello, el proceso se realizó de forma totalmente unilateral, ya que en ningún momento desde la defensa se tuvo dominio de la prueba.

Fallo

El exfiscal Roberto Mazzucco fue destituido de su cargo por tres hechos en los cuales se lo acusaba de haber cobrado coimas a cambio de resoluciones judiciales favorables.
El tribunal resolvió la cuestión por mayoría, ya que el voto en disidencia de Oscar Vera se inclinaba por la absolución del exfiscal.
El juicio político ventiló además de los hechos por los que se destituyó a Mazzucco, toda una serie de cuestiones vinculadas a delitos, tanto por funcionarios judiciales como por abogados del medio, quienes pedían dinero a cambio de gestionar soluciones ante los fiscales.