La intimación de desalojo a seis familias desató la reacción de quienes viven en el asentamiento "Papa Francisco”, en el norte de la ciudad. 

Con interrupción de la circulación sobre avenida Terebintos y calles aledañas, los ocupas manifestaron el temor a ser desalojados de los terrenos, propiedad de la empresa telefónica "AMX Argentina” (Claro), donde habitan desde hace más de cuatro años. 

La firma inició el juicio de desalojo contra las personas que usurpan el inmueble a pesar de las gestiones que han realizado y hecho públicas el intendente de la Capital, Raúl Jalil, y el entonces secretario de Vivienda Octavio Gutiérrez. 

Al tomar conocimiento de las acciones judiciales, que otorgan un plazo de 15 días para desocupar el espacio, los grupos familiares realizaron los piquetes por varias horas en la zona, lo que originó un importante caos de tránsito. 

Uno de los vecinos, en diálogo con este diario, señaló: "Estamos aquí desde hace cinco años, hemos construido nuestras casas, otros viven de manera precaria pero mejorando día a día. Hemos recibido un montón de promesas de varios políticos, hasta nos pidieron la documentación para acceder a programas de mejoramiento, nos iban a abrir las calles, regularizar los servicios, pero como se ve, no hicieron nada, todo quedó en promesas”. 

Los usurpadores solicitaron a los funcionarios de gobierno que intervengan en la situación. Al respecto uno de ellos señaló: "Hemos sido visitados por todos los políticos, nos han dado muchas esperanzas, pero nunca ninguna se concretó. Les pedimos que vean lo que nos está pasando, somos 450 familias que podemos quedar en la calle”.

Los vecinos se disponían a reunirse última hora de la noche para determinar las medidas a seguir con las acciones judiciales que se llevan adelante.