Luego de que comerciantes de Fray Mamerto Esquiú reclamaran por la demora en el avance de las obras de cloacas que se realizan en la ruta 41 y que les genera graves problemas económicos, el intendente Guillermo Ferreyra se reunió con ellos para transmitirles la decisión de exceptuar, en el ejercicio 2018, de impuestos municipales por el plazo de un año a “frentistas” sobre ruta 41 y por un plazo de  6 meses a los comerciantes de zonas aledañas a la obra que ejecuta Aguas de Catamarca Sapem en esa localidad.
En ese sentido y tras escuchar la inquietud de comerciantes y vecinos, Ferreyra indicó que “son obras fundacionales que suscitan este tipo de problemas” en referencia al cambio de cañería de la red troncal de agua potable que se ubica por debajo de la ruta 41.
“Son caños de fibrocemento que tienen más de 50 años y pérdidas permanentes por lo que no se podía obviar este paso antes de asfaltar como se hizo en los otros tramos donde se culminó con los trabajos”, señaló.
Asimismo, el jefe comunal explicó que la “obra de agua no se podía ejecutar de manera simultánea con la obra de cloacas por cuanto las zanjas son diferenciadas en altura y disposición en la calzada, por lo que no se hubiera podido realizar el movimiento de máquinas sin afectar a una u otra”. 
Por su parte, la secretaría de Obras Públicas de la comuna indicó que se trabaja “permanentemente” en la nivelación y regado de los desvíos alternativos a la obra, tanto por la avenida Rosa Olmos hacia el Oeste, como por el trayecto vial conocido como el “Tuscanal” hacia el Este de la misma. En cuanto a la obra en sí, manifestó el acuerdo de trabajar con la empresa Aguas de Catamarca sobre zonas cortas de aproximadamente 50 metros como método para disminuir las externalidades en el tránsito hasta que se pueda culminar con todo el trayecto afectado.  
Finalmente, Jorge Spolidor, coordinador de Interior de Aguas de Catamarca, explicó que se trabaja en simultáneo con las dos “cañerías a la vez por cuanto no se puede afectar el suministro de los vecinos” y que según el plan de trabajo establecido y en función del régimen de lluvias se prevé finalizar “la obra de agua para fin de año”.
Cabe recordar que los comerciantes, alrededor de 25, se convocaron y decidieron hacer público el malestar que le genera graves problemas económicos.