Ninguno de los conjuntos supo cómo romper el cero y el partido fue de mayor a menor en cuanto a calidad.
UTA tuvo algunos ratos de "soltura” en la elaboración del juego, pero no llegaba a concretar las escasas oportunidades de gol que se les presentaba.
Maderera por su parte, no aportó demasiado al cotejo. Ángel Rivera debía bajar demasiado para que le llegue la pelota y quedaba muy lejos de Hugo Olmos y Julio Aibar. Esto facilitaba mucho la labor de Carlos Brizuela y Tiburcio Villagra en la marca.
En los minutos finales de la etapa complementaria, parecía que el local se iba a llevar el partido pero se encontró con la sólida figura de Julio Romero que ingresó en lugar de Juan Bracamonte.