Tras luchar estoica y dignamente con una fatídica dolencia, el Comandante Hugo Chávez, Presidente constitucional de la hermana República Bolivariana de Venezuela, falleció finalmente esta tarde.
No se fue un presidente. No se fue un político más. Se fue uno de los más claros y valientes líderes continentales contemporáneos. Artífice y conductor de un movimiento revolucionario que desde la institucionalidad de la República, fundó un nuevo territorio libre en nuestra América Latina, y luchó hasta que sus fuerzas lo permitieron para profundizar una verdadera revolución cultural, económica y política que lleve al pueblo venezolano a un estado de progreso con justicia. Y con la claridad de los grandes hombres de la historia, contribuyó también con todo su potencial ideológico, político, económico y cultural al afianzamiento de la Patria Grande Latinoamericana. Con un discurso claro y actitudes indubitables y coherentes. Aportó al fortalecimiento de los foros regionales, ayudó decididamente a los pueblos y los gobiernos de las naciones hermanas, no sólo con la solidaridad circunstancial ante hechos trágicos como la Guerra de Malvinas, sino con un compromiso ideológico y político permanente. Así lo comprendieron, así lo vivieron las mayorías populares de la hermana República, que ratificaron ampliamente en reciente elección la continuidad de su proyecto. Así lo entendemos nosotros, que sentimos su anunciada partida como una pérdida propia. Se fue uno de nuestros más claros y valiosos compañeros.
Las derrotadas fuerzas de la reacción, la derecha empresaria y la oligarquía venezolanas, de intereses ligados a las multinacionales y a la antipatria, disfrutaron perversamente su postración, hicieron y hacen campañas desestabilizadoras de su gobierno popular, y hoy se regodean y se frotan las manos pensando en el ocaso del proyecto chavista. Ni qué hablar de nuestro principal enemigo, el gobierno de los Estados Unidos.
Pero el Gran Pueblo de la hermana República está listo para defender su proyecto y su Gobierno. Está listo para defender, afianzar y profundizar cada una de sus conquistas. Ya lo mostró reiteradamente con movilizaciones verdaderamente conmovedoras. Y no me cabe duda que lo ratificará en este momento de dolor. Estamos seguros que esta tragedia galvanizará su unidad y fortalecerá su espíritu.
Desde el Movimiento Popular de este rincón de la América Morena, expresamos al pueblo venezolano nuestro pesar y solidaridad por esta pérdida tremenda, y le transmitimos fraternalmente toda nuestra fuerza espiritual para que continúe sin desmayos su luminoso camino.

Julio Misael Herrera
Secretario Político
Partido Intransigente