Correo y opinión

Sonría, lo estamos filmando

miércoles, 17 de abril de 2019 00:25
miércoles, 17 de abril de 2019 00:25

El año 2019 será el de la inteligencia artificial. Con 1,7 megabytes de información nueva creada por segundo, la disponibilidad de datos es tan solo uno de los factores de la tríada de la que todos hablarán este año, a la hora de implementar herramientas de BI, junto con el computing power. El “oro” está en el mundo físico: las interacciones que suceden en el entorno físico -entrar a una tienda, si el cliente toma un producto, si sonríe o no- también se puede capturar con tecnología de Inteligencia Artificial. Cómo se mueven las personas, cuánto tiempo está con cada producto, qué le interesa que no, qué tipo de emociones se generan. Hay mucha tecnología para transformar las interacciones físicas en datos que puedan ser utilizados dentro de los algoritmos.


Las disponibilización de esos datos en unidades medibles es el gran desafío que tendrán las empresas y las universidades que formen especialistas. Los científicos de datos sin dudas pueden ser aliados en esta cruzada, pero también se vuelven cruciales expertos que hablen el idioma de los negocios. 


Es clave entender esa decisión de negocio, descrifrarla, y comprender cómo aplicar la tecnología de machine learning para mejorar un proceso. Por ejemplo, las posibilidades que ofrecen en CRM tarjetas inteligentes que leen los mails, un asistente que clasifica prospectos o clientes, detectan el nombre de la competencia, qué oportunidad si está enviando, cuándo abrió el mail. Todos esos son datos valiosos para la toma de decisiones. 


Según estudios recientes, un 79 % de las empresas afirma que si se mejora el uso de Big Data, se optimizará la toma de decisiones. Los algoritmos han evolucionado. A partir del concurso de clasificación de imágenes ImageNet de 2012, ganado por Alex Krizhevsky con su red neuronal convolucional, el mundo empezó a prestar atención a esta área de conocimiento. El poder de cómputo de la nube, que hoy se puede usar a demanda, con la share economy de escala de un data center que vende desde un microsegundo de computador hasta lo que se necesite para procesar grandes volúmenes, hacen que sea viable utilizar los algoritmos, entrenarlos, y obtener resultados que sean aplicables al negocio.


El negocio del futuro está centrado en los datos, los que tienen el control del negocio son los dueños de los datos. Los datos representan una mina de oro pero no basta con contar con ellos, es necesario saber qué hacer con esa información valiosa.
La transformación digital es un camino que requiere cimientos sólidos en la plataforma tecnológica que utilizan las empresas. 
El primer paso en este camino es la adopción de una plataforma sobre la cual se puede comenzar a unificar todos los procesos de negocio, para alimentar sistemas predictivos de Inteligencia Artificial, y realimentar los resultados directamente hacia los sistemas de negocios en el contexto del tiempo real del contacto con los clientes. Aquellas empresas que no planifiquen a mediano plazo, quedarán fuera del juego.

(*) Director ERP (sistemas de planificación de recursos empresariales) de Axxon Consulting.

0%
Satisfacción
50%
Esperanza
0%
Bronca
50%
Tristeza
0%
Incertidumbre
0%
Indiferencia

Comentarios

Otras Noticias