En la Novela de fantasía “Alicia en el país de las maravillas”, publicada en 1865 por el matemático, lógico, fotógrafo y escritor británico Charles Lutwidge Dodgson (alias Lewis Carroll); una niña (Alicia), cae por un agujero y entra en un mundo maravilloso. 

Al igual que en esta novela, considerada la mejor del género del sinsentido, nuestro País cayó a finales de 2015 en un profundo agujero donde la recesión económica, la pérdida del salario real de todos, el incremento de la pobreza y del hambre de millones, parecieran de fantasía y fruto de algo maravilloso que ocurrió sin más; como si el actual “Gobierno Cambiemita” fuera sólo otro personaje antropomórfico creado por Carroll y todo es culpa del pasado, del clima, de factores exógenos, de errores de estimaciones, etc., etc., etc. 

“En el País de las maravillas Cambiemita”

Veamos algunos sinsentidos del “País de las maravillas” de este Gobierno Cambiemita:
- “Los inocentes corderos votan por sus verdugos, que los llevan dóciles al matadero; y se fabrican ricos y pobres, los primeros de a decenas y los segundos de a millones.”

En los últimos 3 años; la clase media se redujo 6% (según una consultora cordobesa; informe publicado en La Voz del Interior el 10.04.19) y se arrojaron a la pobreza y a la indigencia no menos de 3 millones de personas. El Salario Mínimo Vital y Móvil, la Jubilación Mínima y las Ayudas Sociales alcanzan para comprar un 47, 42 y 45 % (por ciento) menos que en el 2015, respectivamente. Mientras en simultáneo las pocas empresas y multinacionales que concentran nuestras exportaciones, las Petroleras, las Empresas generadoras y distribuidoras de energía y gas, los Bancos (y todo el sistema financiero local y foráneo) y algunos otros beneficiarios más del maravilloso modelo implementado, registran extraordinarios retornos (gran parte de ellos fugados ya, de nuestra economía). 

- Los slogans parecen verdades y las verdades, por increíbles, parecen slogans.

Todo lo dicho por este Gobierno sin ton ni son, amplificado por los grandes medios monopólicos y obsecuentes de comunicación, al parecer tienen algún asidero y alguna aceptación popular a pesar de que la realidad sea reveladora.
Veamos sólo un ejemplo, slogan: “La inflación está bajando y lentamente va a mejorar la actividad económica”, dichos de nuestro Presidente (publicados en amplia nota del diario Clarín el 13.02.19); realidad: la inflación de Marzo arrojó un elevadísimo 4,7%, acumulando cerca de un 12 % sólo en el primer trimestre 2019 y un ¡55 % interanual! (¡la mayor desde 1992!) y nuestra economía cayó un 2,6 % en el 2018 y se prevé (según el “benévolo” FMI) una caída no menor el 1,2 % en este el 2019. 
Tamaño descaro y forma de mentir sólo puede existir; en el “País de las maravillas”, no? 

Mientras que si manifestamos por ejemplo que: “Nuestro futuro ha sido hipotecado” o “Nuestro País está siendo desfalcado” o “Perdimos, otra vez, total soberanía económica” o “La Argentina es la Patria Financiera del mundo entero”, etc., que al no ser amplificados por los grandes medios mencionados; al parecer son simples slogans y clichés exagerados.

Pero veamos, este Gobierno Cambiemita emitió deuda por más de 187 mil millones de dólares (u$s 187.000.000.000) en lo que lleva de gestión y ¡hasta en 100 años de plazo, elevando el nivel de endeudamiento a casi el 100 % del PBI y arrojando a nuestro País, en tan corto plazo, al default! (¿habrán hipotecado nuestro futuro?); de los cuales más de 97 mil millones de dólares (u$s 97.000.000.000) ¡ya se fugaron en los primeros 3 años! (¿nos estarán desfalcando?) y más de 50 mil millones de dólares (u$s 50.000.000.000) fueron prestados por el F.M.I., quien impone cruentos ajustes y toma hoy literalmente nuestras decisiones de política económica y define nuestro destino como Nación (¿habremos perdido, otra vez, nuestra soberanía económica?). 

Como si fuera poco el endeudarnos, tan exponencial e irresponsablemente, elevó sideralmente las tasas de interés y permitió la libre entrada y salida de los capitales golondrinas. Llegamos a tener un stock de cerca de 1,5 billones de pesos ($ 1.500.000.000.000) “timbeando” con las populares y accesibles “Lebacs”; que hoy fueron reemplazadas por las exclusivas y exquisitas “Leliqs”, donde los Bancos siguen haciendo fortunas por 1,2 billones de pesos ($ 1.200.000.000.000) a tasas cercanas al 70 % ¡que no existen en ningún lugar del planeta! (¿seremos hoy, la Patria Financiera del mundo entero?).
Pero este descalabro endeudatorio y especulativo, que nos posterga de todas las maneras posibles y nos cuesta cientos de millones de pesos por día; al parecer no existen en el “País de las maravillas” (sino que son otros los que se robaron todo).  

- “Con especulación electoral para intentar “aliviar” las consecuencias del desastre realizado, se tomaron denostadas y criticadas medidas; contrarias a su ideología y tildadas de populistas”.

En estos últimos días (“en el País de las maravillas”) se anunció, con fecha de vencimiento (¡hasta las próximas elecciones!), un paquete de triviales medidas; donde, principalmente, se: 

1.    “congelan precios” de ciertos alimentos (de 60 artículos de la canasta básica alimentaria bajo el populista Plan de “Precios Cuidados”; los cuales ¡ya sufrieron fuertes incrementos!, que el Gobierno convalidó previo al acuerdo con las 16 grandes Empresas seleccionadas);
2.    “congelan también (no se retrotraen) las tarifas” de energía, gas, agua y transporte (las cuales ya sufrieron fortísimas subas en estos meses previos; por ejemplo en la Energía se programó un incremento anual 2019 del 48 % y ya aplicó el 40 %, ¡sólo restaba un 8 %! -el cual será pagado a las Empresas; es decir que, bien al estilo populista, ¡será subsidiado por el Estado!-;
3.    “otorgan descuentos y créditos ANSES” a todos los beneficiarios de la seguridad social (descuentos entre el 10 y 25 % y préstamos de hasta $ 200.000 y hasta en 60 cuotas para jubilados a una tasa, “no usuraria” según los dichos de nuestra Ministra Stanley, del 40/50 % anual; acá sí, bien al estilo capitalista);
4.    Implementa, para las Pymes, un “Plan de Pagos” por deudas fiscales (así es; para las Pymes, ¡un simple Plan de pagos para pagar deudas con la Afip!; no hace falta nada más, no?); 
5.    retoma el, también populista, “Plan Procrear” para 10.000 nuevas familias; etc., etc.   

El “Plan Parche” es una burda estrategia electoral cambiemita, que no modifica el rumbo del modelo neoliberal implementado. Sólo pregona dar un “alivio”, provisorio y perentorio, no para mejorar definitivamente la crítica situación que sufre casi toda la población argentina; sino para que la misma (quizás) no continúe agravándose.

No son soluciones de fondo; la inflación no aminorará (sólo tal vez, si se la compara con el nefasto 2018) porque se realice un “pacto de caballeros” con algunas pocas empresas para que no suban los precios de unos pocos artículos por un corto tiempo (pacto que se romperá sin más, ante la mínima y próxima corrida cambiaria) y se suspendan los exiguos incrementos de tarifas pendientes. Como tampoco mejorará la situación de 18 millones de beneficiarios de la seguridad social porque se le otorguen algunos descuentos y se les ofrezca ¡endeudarse hasta en 5 años para poder pagar hoy!, sus medicamentos o las exorbitantes tarifas o para poner algo sustancioso en su plato de comida. ¿Se comprende lo macabro de esta medida?

No hay pericia, ni ingenio alguno, ni cambio de rumbo, en el “País de las maravillas” (al parecer sólo hay; intentos de parches estériles, previo a las elecciones presidenciales).

Continuamos en la próxima…

Como tengo mucho más que escribir pero poco papel; en la próxima columna, en la Parte II, seguiremos analizando algunos sinsentidos y cuestiones fantásticas más; que todos vivimos hoy, en este “País de las maravillas cambiemita”. Espero nos reencontremos.