Al señor director de Diario “El Esquiú” solicito tenga la gentileza de publicar la siguiente entrevista a la madre del joven Agustín, Verónica Rasguido. 

Este joven nació en Bañado de Ovanta el 12 de mayo 2001, cursó sus estudios primarios en la Esc. N2 8 Prof. Alejandro Ruso y sus estudios secundarios en la Escuela Secundaria del lugar. Verónica Rasguido, su madre, cuenta que fue hijo único muy apegado a ella, era un niño muy solidario, sociable y muy amiguero. Practicó danza folclóricas en el ballet del lugar, le gustaba el fútbol y ocupaba el puesto de arquero. Participó en todos los talleres creativos que se realizaban en la Escuela Secundaria. Terminados sus estudios secundarios, su sueño era estudiar medicina, al objeto consiguió un trabajo en un comercio para ahorrar dinero y autosolventar sus estudios universitarios. Sus sueños se vinieron frustrados, al producirse su inesperada desaparición y  de una manera nunca imaginada. Su madre comenta que el día 25 de diciembre del año 2019, en un almuerzo familiar, con su querida “Abu”, sus tíos y su madre, Agustín muy feliz les contaba hermosos momentos vividos la noche anterior en el “boliche de Los Altos” donde fue con varios amigos del pueblo. Después de terminar el almuerzo, fue a la casa de sus “íntimos amiguitos”, los hermanos “Rosales”, allí jugaban a la “play” y veían películas, inesperadamente a las 13.30 comenzó a sonar su teléfono y lo hacía de una manera reiterativa e insistente, Agustín no tenía muchas ganas de atender, pero ante la insistencia, atendió, era una menor con quien que en épocas pasadas tuvo una relación sentimental. Se dirigió al joven de una manera muy particular, logrando consensuar una cita en el “pareja Ovanta”, cerca del pueblo a las 17 horas, para llegar al lugar el joven solicitó prestada una moto a un amigo. 

Cabe destacar desde que terminaron su relación, los jóvenes no tuvieron ningún tipo de contacto, la menor no tenía el número del teléfono del joven, se valió de un “audio”, se comunicó con una prima de Agustín diciendo que lo necesitaba para darle a una joven, que quería conocerlo, de esta manera pudo armar la emboscada. Pasadas las horas y al no aparecer el joven, los amigos y los familiares perdieron la comunicación telefónica, su madre “desesperada” tipo 23.30 se presentó a la Policía para realizar la correspondiente denuncia, se negaron por considerar que el joven estaría por ahí nomás y pronto regresaría. Ante tan crítico momento, la madre solicitó a la Policía que la llevaran al lugar de la cita, pero al no haber nada, al costado del río, solicitó si podían avanzar hacia una zona cercana, que no es boscosa, con pasto poco alto, la “oficial” Mariela Díaz se negó al justificar que no tenían “linternas” induciendo que su hijo ya volvería, si no al otro día cuando sea de día podrían volver. Relata Verónica que toda la noche llamó a la Policía, en ningún momento atendieron, el teléfono al día siguiente en una pueblada, salió una gran cantidad de personas, junto a los empleados municipales, se fueron al lugar antes mencionado y muy temprano encontraron el cuerpo sin vida del joven, también el rodado. Se comunicó a las autoridades del hospital, comentó la mamá que eran las seis de la mañana, la comisaría estaba cerrada con llave. 

Se destaca la inacción, irresponsabilidad y falta de respeto de la autoridad policial, que hizo muy poco para investigar el caso, si se tiene en cuenta que el cuerpo del joven se encontró en las inmediaciones, donde su madre a la noche anterior, suplicó a la Policía para que lo buscaran ante la negativa de la oficial. 

A las 8.30 horas del 26 de diciembre, llegó el cuerpo forense de la Capital para ser investigada la menor, se pudo determinar que tenía pólvora en la ropa. Se determinó que la misma llegó al lugar de la cita a las 17.30 acompañada de su novio Elías Nievas de 20 años, sin mediar palabras, de 3 balazos ultimaron a Agustín de la manera más criminal. La mamá de Agustín relató que, en los teléfonos secuestrados a !a menor, se detectó el llamado que hizo para la cita, como así mensajes con contenidos satánicos y que junto con su novio tenían todo preparado para hacerlo desaparecer al joven Agustín en otro lugar no donde se produjo el hecho.  

La menor era oriunda de Buenos Aires y hace un tiempo se radicó en Ampolla con su familia como también Elías Nieva, que hace algunos años se radicó en Frías, personas de otros lugares, con costumbres raras y conducta “psicopáticas” diferentes a la vida sana de los lugareños. El joven Nieva pronto desapareció del medio, “Verónica” se contactó con “Cámara del crimen” del Canal TN y a través de videoconferencia, hizo conocer el “caso” que tomó repercusión nacional con la extraordinaria colaboración de este medio, la policía bonaerense logró detener a “Elías Nievas” en la localidad de Merid. Posteriormente fue trasladado al “penal de Miraflores” se espera pronto el “JUICIO POLÍTICO” y la correspondiente condena “PERPETUA”. La madre de Agustín, muy dolorida expresó a mi hijo no me lo devuelven más, solo exijo “JUSTICIA” si se tiene en cuenta la menor en pocos días, el próximo año, cumplirá 16 años, solicita se revea el caso y se tome las medidas correspondientes, considerando que hay pruebas suficientes para determinar la complicidad y como coautora del hecho exijo “JUSTICIA”. 

Si recordamos que el “Código procesal” proviene del año 1980, de un decreto de la dictadura militar, se requiere el urgente accionar del “Congreso” que permita una profunda y estructural REFORMA EN LA JUSTICIA. Sobre todo el régimen “PENAL JUVENIL”.  PARA TERMINAR LA NOTA, VERÓNICA RASGUIDO expresó: “Agustín era la luz de mis ojos, mi compañero, mi esperanza. Vuela alto hijo, tu partida fue el día más triste de mi vida. Algún día en el cielo, nos encontraremos nuevamente”. 
Dicen que las heridas cicatrizan, pero hay heridas en el alma, que sangran hasta del día que partimos. GRACIAS a este prestigioso medio por permitirme poder expresarme.

Ramón Arturo Brizuela 
DNI N° 8.510.174