El Salar del Pipanaco fue sede una vez más de la ya tradicional “Fiesta Provincial de La Batea”. Allí, en el paraje “Tucumanao” –que pertenece al departamento Pomán- se celebró el pasado sábado la décima edición de esta popular fiesta que reúne a lugareños de distintas zonas aledañas, y que cada año convoca a más personas.
Esta vez, la fiesta fue para muchos la excusa para visitar el lugar y compartir con sus habitantes la esencia del encuentro, pero atendiendo a algunas de las múltiples necesidades de su gente.
La secretaria de Cultura de la Provincia, Claudia Ferreyra, tomó como iniciativa donar libros y la totalidad de los alimentos recaudados en las noches del festival “Tango en los caminos del Vino”, que se desarrollara recientemente en la provincia.
La ayuda, que resultó un gesto para la calidez con que los lugareños reciben año a año a los visitantes, consistió también en panes de sal y otros minerales para reforzar la salubridad del ganado, por parte del Ministerio de Producción, y packs de agua mineral y otros alimentos enviados por el Ministerio de Desarrollo Social.
Además, distintos profesionales llegaron al lugar para prestar asistencia gratuita en veterinaria y luz solar a los habitantes de la zona, y varias empresas y medios de comunicación hicieron también su aporte solidario.
La entrega fue recibida en un sencillo acto efectuado en la Escuela 73 de Tucumanao, en medio de alumnos y docentes de las cuatro escuelas del salar, además de los lugareños.