Los diferentes puntos de recepción de estudiantes de la provincia se caracterizarán por contar con fuertes controles de seguridad, a los efectos de promover una mayor tranquilidad en el desarrollo de las actividades previstas, como también prohibir la venta y el consumo de bebidas alcohólicas a menores de edad.
De esta manera, en cada una de las jurisdicciones se implementará el régimen de veda de alcohol, previéndose fuertes sanciones a aquellos comerciantes que vendan alcohol a los estudiantes.
Además, se prevé rigurosos controles en los diferentes puestos camineros, con la finalidad de evitar la circulación a alta velocidad de automóviles, como también el transporte de bebidas alcohólicas.
Estos controles se desarrollarán, en la mayoría de los casos, en forma conjunta entre efectivos policiales y representantes de los diferentes municipios catamarqueños.