Leyendo un artículo firmado por Baldomero Alvarenga, bajo el título “¿Qué harán los artistas K el 11 de diciembre”? comprobamos, una vez más, que también en lo que se conoce como “el mundo del espectáculo” están los unos y los otros en la consideración del gobierno nacional. Los privilegiados y los ignorados en la preferencia gubernamental. El escrito en cuestión tiene a la figura de Andrea del Boca como blanco en su apertura: “La otrora precoz y amorosa actriz infantil fue catalogada por algunos como la Shirley Temple del subdesarrollo. Hoy nada de ese talento y frescura queda en ella. Sin embargo, Andrea del Boca tuvo la intuición de captar esta jugosa veta generada por la política y pasó a dedicar su vida a la causa kirchnerista. Con contratos siderales por telenovelas que no veía nadie, la exniña prodigio embolsó para tener y guardar. Pasados a quebrantos irrecuperables los desastrosos resultados económicos de sus telenovelas imposibles de mirar, Andrea anda sin trabajo y se ha llamado a silencio. No se la ve mucho ahora en los actos de la Casa Rosada. Se extraña su presencia, que siempre fue muy útil para agigantar aún más la epopeya”.

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Avanza el comentario diciendo: “Cristina Fernández de Kirchner utiliza al sector ‘dócil’ de la colonia artística nacional a los fines de ser vista como una líder cercana al pueblo. Pero algunos se resisten y mantienen sus convicciones a pesar de los tentadores trabajos que les prometen. Para ellos hay palos (carpetazos). Y si no, pregúntenle a Ricardo Darín, quien osó cuestionar el origen del patrimonio en blanco de la familia presidencial. Recibió una veloz respuesta de la jefa del Ejecutivo por las redes sociales, recordándole el desafortunado ‘desliz’ que tuvo con su expareja Susana Giménez en el tema de la importación de autos para discapacitados”. A la hora de hacer nombres de los favoritos del gobierno nacional, el artículo alude a: “Pablo Echarri, Nancy Duplá, Florencia Peña, Coco Silly, Daniel Aráoz, Fito Páez, Peteco Carabajal, Gastón Pauls, Nacha Guevara, Ignacio Copani, Gerardo Romano, Federico Luppi, Teresa Parodi, Susana Rinaldi, Rita Cortese, Víctor Heredia, Esther Goris y Leonor Benedetto”, como “algunos de los tocados por la varita mágica del éxito profesional en forma simultánea con su ingreso a la cofradía de chupamedias del gobierno. Como incorporación de último momento, mencionemos al inclasificable Tití Fernández, a quien ahora le cuesta cada vez más salir de los estadios sin ser apedreado”.

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En la parte final del escrito, su autor señala: “Ya terminará esta etapa oscura y muchos de ellos dirán: ‘Bueno, al menos amasé unos mangos. A otra cosa, mariposa’. Pero habrá otros más permeables a la voz de sus conciencias que recapacitarán, se arrepentirán y nunca más podrán volver a caminar por la calle con la frente alta”. Tómelo o déjelo. Puede compartir o no su contenido, pero hay algunas verdades que son irrefutables cuando se habla de los predilectos del poder en el ambiente artístico. Resta señalar que no se trata de una novedad de los últimos años. Esto ha ocurrido siempre, incluida la época de los gobiernos militares, a lo largo y ancho del país. Aquí, en Catamarca, sin ir más lejos, también están los artistas que fueron marginados de las preferencias de los que habitaron por muchos años en Casa de Gobierno. Recordamos como caso emblemático de qué manera fue “borrado” durante mucho tiempo de alguna programación radial o festival folklórico un gran profesional del micrófono como fue Luis Oscar Aísa. Por supuesto que están aquellos que tienen la “virtud” de caer parados con todos los gobiernos de turno; algunos por méritos artísticos, otros por simples chupamedias de ocasión. Cada uno sabrá ponerse en la columna que mejor le parezca. O le convenga.
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La fría mañana de ayer, más el feriado nacional, motivó que la mesa de “los de siempre” tuviera asistencia perfecta en el conocido bar céntrico. El tema excluyente del intercambio de ideas fue el paro docente.
-Mozo: ¡Hola gente linda!
-Periodista jubilado: Una vuelta de café, invito yo.
-Docente jubilada: Gracias compañero. De entrada les digo que estoy furiosa con los paros docentes. ¿Qué hacen los padres que no salen a la calle a exigir el dictado de clases para sus hijos?
-Comerciante de la peatonal: Paran por cualquier cosa. Dicen que la próxima medida de fuerza es porque el ministro Ariza no saca una resolución para que los meses de enero y febrero tengan 60 días cada uno.
-Bailarín: El paro que viene es hasta que Ariza se afeite la barba.
-Poeta: Comentan que la próxima huelga será hasta que Ariza determine que solamente se dicten tres días de clases a la semana.
-Docente jubilada: ¡Estos ya son unos vagos con “B” larga! En mi época era sagrado enseñar a los niños. Hoy, ha desaparecido la vocación docente.
-Bailarín: Me enteré que quieren parar hasta que Ariza se ponga corbata.
-Docente jubilada: Son capaces de convocar a un paro hasta que el ministro se corte el pelo.
-Bailarín: Van a exigir que Ariza resuelva que el mes tenga 15 días. ¡Y si no, meta paro nomás, vivan nuestros maestros, carajo!
-Mozo: Maestro, lo que se dice maestro con mayúsculas, era Chichilo Naranjo. Los de ahora son aprendices, no pasa nada.
-Bailarín: Éste padece el colmo del oso panda. Por más que le tomen fotos a color, va a salir en blanco y negro.
Y se fue el mozo, silbando la melodía de la película “Al maestro con cariño”.