A telón abierto

viernes, 24 de mayo de 2019 00:21
viernes, 24 de mayo de 2019 00:21

En la entrega anterior de esta columna anunciamos el tema que hoy va a ocupar este espacio: las mujeres piden escenario en un festival tradicionalmente machista como es la Fiesta Nacional del Poncho. Con una aclaración: fue el Poncho también quien propuso, a lo largo de su historia, muchas jornadas de espectáculos en la programación central protagonizadas por mujeres comprovincianas y consagradas a nivel nacional e internacional. En una época cuando todos los días se habla sobre la violencia de género y los derechos de las mujeres, en un suplemento especial del diario Clarín apareció un tema para el debate, que ahora pasamos a compartir: ¿Cómo funcionó hasta acá el machismo en la música popular argentina? El informe hace referencia a clásicos del tango y el folclore que hoy están bajo la lupa, bajo la premisa de que “los avances por la igualdad de la mujer avivan la reflexión acerca de cómo fue tratada en la música popular argentina”. Y ponemos a la fiesta de las vacaciones de julio como ejemplo porque los/las artistas locales le piden al Poncho lo que resignan (léase plata) calladitos en otros festivales provinciales. Históricamente ocurrió así y a las pruebas nos remitimos: al Poncho se le exige la paga que no se le exige a ningún otro encuentro festivo en Catamarca e incluso nos animamos a decir en el resto del país; al Poncho se le reclama preferencia para actuar a la medianoche y en otros festivales (especialmente en el sur y en Córdoba) terminan cantando a la madrugada para las sillas y un puñado de personas como público (tenemos documentación que avala lo expresado); en el Poncho el número local rechaza la posibilidad de ser el ofrecimiento de cierre de la velada artística (¿por qué? ¿cuál es el temor?); al Poncho se le demanda no actuar entre los tres primeros artistas y menos ser el encargado de la apertura del desfile artístico, entre otras cosas.
   ********


  Volviendo al eje central que nos ocupa hoy: un rápido repaso por los archivos dan cuenta que hubo noches de espectáculos en el Poncho que no tuvieron como principal animadora a la mujer, salvo, claro está, a las bailarinas que formaban parte de un grupo de danza, o de una delegación departamental o como candidata a reina. Veamos algunas programaciones oficiales: miércoles 13 de 1994: José “Pito” Tapia, Carlos Trejo, Néstor Zurita, Los de Catamarca, Los Gauchos Catamarqueños, Jorge Rojas (el querido y recordado catamarqueño), Trío San Javier, Los Cantores del Alba y Víctor Heredia. Sábado 24 de 2010: Los Luceros de Mutquín, Hugo Nanni, Cololo Macedo, Mingo Aguirre, Trío Zamba, Néstor Pacheco y Dúo Coplanacu. Jueves 14 de 2016: Lucas Piedra, Pascual Gutiérrez, Nicolás Reina, Tono Aybar, Mauricio Cabrera, Miguel Melián, Marcelo Amador, Americanta y Los Carabajal. Miércoles 19 de 2017: Los Quilmeños, Juan Lapacho, Hermanos Rodríguez, Carlos Arréguez, Dúo Amistad, Diableros de Orán, Los Hilos del Viento, El Algarrobal, La Vorágine, Franco Barrionuevo, Los Hechiceros, Ricardo Arce, y Dúo Coplanacu. Dice el refrán popular: “un botón basta de muestra…” y queda establecido sin discusión alguna que hubo noches que  las mujeres brillaron por su ausencia o el predominio de la presencia masculina en el escenario mayor fue notorio. Podríamos citar muchos otros ejemplos. Algo para destacar: desde hace varios años se nota, también en el Poncho, el protagonismo femenino en la conducción del show artístico, especialmente de valores del interior provincial. Decimos por nuestra parte: extrañamos la voz de Mariana Ventrice en las noches del Poncho.


   ********
    Se viene el Poncho 2019. Y se vienen las “Margaritas”, el colectivo femenino que explotó en marzo de este año con un festival de cuatro sábados en el Teatro del Sur, bajo la consigna “Por más mujeres en el escenario de la vida”. Fueron medio centenar de mujeres que ofrecieron un abanico de propuestas artísticas que ganaron el reconocimiento del público lugareño. Pero fueron por más: en la primera semana de Mayo el Movimiento de Mujeres de la Música de Catamarca “Margaritas” anunció la creación de un Observatorio Artístico Cultural de Género que, entre otros objetivos, pretende “un seguimiento de grillas y  elaboración de proyectos culturales que incluyan, escuchen, difundan, respeten y remuneren a las músicas  de Catamarca, conforme lo prevé el proyecto de Ley de Cupo que se impulsa a nivel nacional y que se hará lo propio en el orden local”. Esta búsqueda de mayores espacios para las mujeres músicas en la provincia, apunta sin lugar a dudas, entre otras cosas, a tener más presencia en los festivales folclóricos y como no podía ser de otra manera, el Poncho surge como uno de los principales desafíos. En la pretensión de borrar la manifiesta desigualdad que existe en las carteleras artísticas. Así como ocurrió en la política, las mujeres catamarqueñas quieren seguir pisando fuerte en el campo artístico-cultural. Un lindo debate que se viene. Desde esta columna prometemos seguir ocupándonos del tema, buceando en la historia del Poncho. Esto recién comienza. Hasta el viernes.
 

45%
Satisfacción
18%
Esperanza
27%
Bronca
0%
Tristeza
0%
Incertidumbre
9%
Indiferencia

Comentarios

24/5/2019 | 16:09
#149006
Los festivales lo hacen para ganar dinero q el público deja en las ventas de entradas...no creo q muchas de las chicas q piden mas escenario corten 100 tickets en un festival....algunas cantan en el living de su casa...otras de cantar en ingles, se transforman en folcloristas para julio y ademas trabajan solo para su ego...bienvenidos al lento proceso de matar los eventos multitudinarios por queres obligar a los productores a contratar a mujeres q no llevan ni llegan a mucha gente....