Artículo especial para El Esquiú.com por el Año Jubilar Mariano 2020

La casa de María: Catedral

jueves, 27 de junio de 2019 00:13
jueves, 27 de junio de 2019 00:13

Por el Pbro. Mario Gustavo Molas

Con el correr de la historia de la Iglesia, en la medida en que el estilo jerárquico romano fue absorbido por la Iglesia, la figura del papa y los obispos se fue equiparando a la de reyes y príncipes. Así la tiara papal de triple corona manifiesta esta acumulación de poder.
El acento se desplazó también hacia la figura del lugar de residencia de los obispos, sus palacios episcopales, sus rentas, territorios y prebendas.
Los obispados más que tierra de misión, eran territorios redituables de poder; la cátedra del maestro era cada vez más suntuosas Catedrales en competencia entre principados y reinos.
La Basílica de San Pedro tiene la “Gloria” de Bernini con la linterna en el conocido vitreaux dedicado al Espíritu Santo entre nubes y ángeles, una silla, que según la tradición usó San Pedro, y que entre enormes estatuas de los santos padres de Oriente y Occidente, representa la Cátedra de Pedro, la Santa Sede; sin embargo la Catedral del Papa como Obispo de Roma es San Juan de Letrán.
Basta mencionar San Patricio, Notre Dame, Sevilla y su Giralda, Luján, Guadalupe, Aparecida, para hacerse una idea del esplendor de las catedrales. Que desde lo románico, atravesando el gótico y el renacimiento llegan a ser hoy referentes de la misma fe.
Al ser dado por San Pío X  el primer obispo de Catamarca, Mons. Bernabé Piedrabuena elige el templo dedicado a la Madre del Valle como su sede y cátedra, llevando con ello al templo a la categoría de Catedral.
El Papa da el título de basílica, el obispo el de catedral y la costumbre de los fieles al santuario.
Es así que desde 1910 en que se crea la Diócesis de Catamarca, se sucedieron ocho obispos a saber: Mons. Bernabé Piedrabuena (1910-1923), Mons. Inocencio Dávila y Matos (1927-1929), Entre 1927 y 1933 asumió como Vicario Capitular en sede vacante Mons. Julio Arnedo;  Mons. Vicente Peira (1932-1934), Mons. Carlos Hanlon (1935-1959), Mons. Adolfo Tortolo (1960-1962), Mons. Pedro Alfonso Torres Farías (1963-1988), Mons. Elmer Osmar Miani (1990-2007) y Mons. Luis Urbanc (2007 y continúa)

 

El Cabildo Catedral

Para un mejor gobierno de la Diócesis, que no se convierta en una monarquía en solitario, la Iglesia siempre proveyó a los obispos de la ayuda adecuada.
Hoy el obispo dispone del Colegio de Consultores, del Consejo Presbiteral, el Consejo de Asuntos Económicos, el Consejo Diocesano de Pastoral.
La mayoría de estas funciones las asumía, antes del Concilio Vaticano II, el Venerable Cabildo Catedral –como Consejo y Senado del Obispo-, integrado por los llamados “canónigos”.
Su presencia desde 1929, por Bula de SS. Pío XI, “Romani Pontifici”  del 22 de abril de 1929, durante el obispado de Mons. Inocencio Dávila y Matos, duró hasta pasado el Concilio, y aun cuando tiene cierta vigencia en otras diócesis, por el fallecimiento de sus últimos miembros, terminó desapareciendo en Catamarca; siendo su último canónigo, Mons. Pío Murúa.
Su función, establecida en el Estatuto, era en primer lugar, la oración solemne del oficio divino o breviario, que debía realizarse en el Presbiterio de la Catedral, en traje coral y ocupando cada uno el sitial que le correspondía según su jerarquía.
En el Consejo del Obispo –Cabildo Catedral-, los canónigos que lo formaban tenían sus sillas, reclinatorios y luces, al costado del presbiterio, seis de cada lado; a la derecha del altar se ubicaba la autoridad mayor, el Deán.
En segundo lugar, el oficio propio de asesorar al obispo, se desarrollaba en la propia sala capitular, y atañía todo lo que el obispo consultara.

Primer Cabildo Catedral

Cuatro dignidades y seis canonjías.
Deán: Mons. Dr. D. Ramón Rosa Vera
Arcediano: D. Pedro Martín Oviedo
Magistral: D. Juan B. Sueldo
Arcipreste: D. Julio Arnedo
Canónigo Teologal: Pbro. Pedro Mauricio Navarro
Canónigo Penitenciario: Pbro. D. Samuel Toranzos
Canónigos: Pbro. Aníbal Villagra, Juan W. Regalado, Pbro. Tomás Cardoso y Carlos Toranzos Pla.n
 

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Comentarios

27/6/2019 | 11:21
#149006
qué tal la pedofilia de toda la iglesia y sus encubridores con el cuentito de la adoración a la muñeca de yeso y madera?