Sandra Martínez presenta “Las ilegítimas”, una obra basada en vivencias reales de mujeres privadas de la libertad
La pieza teatral recupera las historias de mujeres detenidas que conoció cuando estuvo presa un año y medio por un crimen que no cometió.Este sábado 10 de mayo a las 21.30 horas, el grupo La Casita Teatro presenta “Las ilegítimas” en el Salón Calchaquí. La obra, escrita y dirigida por Sandra Martínez, vuelve a escena con una propuesta que invita a pensar desde el dolor y la empatía.
“La obra es una obra dramática que trata la historia de tres mujeres, dos de ellas están privadas de su libertad, y la tercera es su guardia”, explicó Martínez en diálogo con La Mañana de El Esquiú, programa emitido por Radio El Esquiú 95.3. La historia recupera vivencias marcadas por el encierro y las violencias de género, con una narrativa que busca romper estigmas y acercar realidades que muchas veces se desconocen.
Al respecto contó que el texto toma elementos reales: “Es una experiencia que hace muchos años, más de 25, me tocó vivir”. Reveló que en 1999, cuando tenía 20 años y estaba embarazada, la Justicia la detuvo acusada de un crimen que no cometió. “Mi madre fue asesinada brutalmente aquí en Catamarca. Mi mamá es Celia Lidia Molina Martínez. El principal sospechoso anda por allí, no puedo dar nombres ni nada, ni hacer referencias, por cuestiones legales, y en ese momento se me acusó a mí”, afirmó. Estuvo un año y medio detenida y, tras un juicio, la absolvieron por unanimidad. “Se resarció todo y por eso yo puedo en este momento contar la historia, trabajar normalmente y todo lo demás”, dijo.
Durante su detención conoció a muchas de las mujeres cuyas historias inspiraron la obra. “Lo único que no hice, porque no pude a nivel personal, fue ponerme yo en la historia, yo no aparezco en la historia. Son historias de otras personas, pero que yo conocí y que por supuesto estan modificadas y alteradas para que sea una ficción”, aclaró. El guión nació como radioteatro y fue seleccionado en el concurso Escenas en Sintonía del Instituto Nacional del Teatro.
Martínez, hoy docente y madre de cinco hijos, dijo que escribir esta obra también funcionó como un acto reparador. “He tratado de no ponerme en ese lugar”, afirmó sobre su esfuerzo por no revictimizarse. “Mi proceso ha sido de que hay cosas que corresponden a la Justicia y que nosotros como familia hicimos lo más que pudimos”.