Para un párroco católico de Alemania todos los recursos son válidos cuando se trata de evangelizar. Ante la dificultad de lograr la atención de los fieles masculinos, este cura no bajó los brazos y pensó una buena excusa para poder reunirse con ellos: ceremonias religiosas con whisky de por medio.

"Tengo menos éxito con un encuentro para hablar sobre la Biblia. Con esta bebida llego mejor a los hombres", explicó el religioso Thomas Eschenbacher a los medios locales que se sorprendieron por su estrategia.

El cura alemán, de 53 años, difundió así una actividad que consiste en ejercicios espirituales con whisky. Será el próximo 11 de enero en Hammelburg, en la región de Baviera. La convocatoria fue tan popular que ya no hay vacantes disponibles para anotarse.

Este retiro tendrá como objetivo reflexionar y profundizar la relación de los creyentes con Dios. En algunos momentos, los participantes deben permanecer en absoluto silencio, aunque después suelen tener largas caminatas en donde comparten sus vivencias.

Eschenbacher, que es el responsable de la parroquia Hammelburger Land, ya es conocido por la comunidad local por sus ideas creativas. Durante años dio misas en las que pronunciaba la homilía con rimas. Hasta organizó una procesión futbolista para celebrar un nuevo ascenso del Núremberg a la primera división de la liga alemana.