Una de las grandes promesas del fútbol catamarqueño, Daniel Alejandro Carrizo, está pasando un momento difícil.
“Ale” Carrizo, como lo conocen todos desde que jugaba en las inferiores de Salta Central, juega desde hace siete años en las divisiones menores de River Plate, donde se convirtió en una de las figuras millonarias, a tal punto que fue convocado para integrar seleccionados argentinos juveniles, y llegó incluso a disputar el Mundial Sub 17 en Corea del Sur.
Carrizo, que jugó en reserva y trabaja habitualmente con el plantel profesional, disputó el último sábado un partido correspondiente al torneo oficial de cuarta división de AFA, en el cual River enfrentó a San Lorenzo de Almagro en el Bajo Flores.
Los millonarios cayeron 2 a 0, pero ese fue un detalle anecdótico: lo más grave fue que, en una acción de juego, un jugador de San Lorenzo pisó violentamente al chico catamarqueño, provocándole una dura lesión.
Los estudios posteriores determinaron que “Ale” sufrió una fractura en el pie derecho, lo que lo mantendrá alejado de las canchas al menos ocho semanas.
El Esquiú.com habló ayer con la familia del jugador. Todos están muy tristes y preocupados, y la madre se preparaba para viajar a Buenos Aires, ya que hoy mismo Alejandro será sometido a una intervención quirúrgica.
En la operación, se prevé la colocación de un clavo en el quinto dedo del pie de “Ale”, y a partir de allí iniciará la rehabilitación para retornar a las canchas.
Un momento difícil para cualquier deportista, y en especial para un jugador de fútbol, máxime teniendo en cuenta que Carrizo venía desempeñándose en gran nivel, y estaba en la mira de varios clubes, incluyendo instituciones del exterior.
Desde aquí le enviamos todo nuestro aliento al querido “Ale”, que con sus veinte años sin dudas superará este problema y retornará a las canchas para seguir defendiendo el prestigio catamarqueño con la dedicación y conducta que lo caracterizó siempre.
¡Fuerza Ale!