El entrenador ‘xeneize’, Claudio Borghi, decidió cambiar el escenario de los entrenamientos y mudarlos a un sitio más alejado, en búsqueda de mayor tranquilidad para trabajar con el plantel. Los malos resultados cosechados en el arranque del Apertura condicionaron su continuidad en el cargo.

Después de la derrota sufrida el domingo ante All Boys, la segunda consecutiva en tres fechas disputadas hasta el momento en el torneo Apertura, el plantel de Boca regresó esta mañana a los entrenamientos en el predio de Casa Amarilla, aunque este escenario cambiará a partir de mañana, ya que el DT dispuso regresar a la localidad de Pilar, donde su equipo realizó la pretemporada.

La idea del técnico es realizar los entrenamientos en un sitio más alejado del ‘Mundo Boca’, en búsqueda de tranquilidad y concentración para sus jugadores, que hasta el momento sólo cosecharon un punto de nueve posibles.

Por eso, mañana el plantel realizará un trabajo en doble turno en Pilar, el jueves regresará a la Bombonera para efectuar un ensayo futbolístico y luego volvería nuevamente a Pilar.

Borghi condicionó su continuidad en el cargo al resultado del próximo domingo ante Vélez, por la cuarta fecha, en la Bombonera, aunque ayer los dirigentes salieron a respaldarlo y, según aseguró el vicepresidente primero, José Beraldi, no será despedido en caso de sufrir un nuevo revés ante el equipo de Liniers, uno de los líderes del certamen.

Fuente: Telam