La cuarta fecha de esta zona 7 se fue, y de cierta forma cambió el mapa. Los empates de los restantes partidos le dieron a Policial la posibilidad de llegar al segundo puesto, junto con el Famaillá de Miguel “Tigre” Amaya, que tiene un juego menos.
Muchos de los entrenadores sostienen que los equipos aparecen en su real dimensión después de jugar 6 ó 7 encuentros. Esa etapa se está acercando.
Hasta aquí, salvo por Gimnasia y Tiro, los equipos no han logrado tener regularidad.
Policial gana (sufriendo) de local, pero de visitante todavía no logró sumar. Es una clara muestra de cómo se está jugando este torneo. Se puede decir lo mismo de Concepción, FC, que tuvo actuaciones interesantes, aunque la tabla no diga lo mismo.
Los jujeños andan más o menos por el mismo camino. Por eso será una fecha particular la 5ta, con el objetivo de lograr algo de regularidad como el principal objetivo.
A la hora de salir a la cancha hay que tener presente que este torneo no se termina, no se corta: se juega de septiembre a abril, y el impacto óptico que da la tabla de posiciones influye en todos los aspectos. Nadie puede darse el lujo de descuidar ese aspecto, que influye en toda la estructura montada para jugar este deficitario Argentino B.