Defensores de Esquiú sufrió un atentado (así lo definieron sus dirigentes) en la puerta de la sede de la institución. “Uno piensa que a uno no le puede tocar; vemos los diarios con todo lo que está pasando en Villa Cubas y Tesorieri, y hoy nos dimos con que en el frente de la institución explotaron dos bombas molotov y quemaron mitad de la puerta”, declaró el dirigente “sagrado”, Diego Gersani, al dar a conocer la noticia, en una semana complicada que debería llevar al replanteo de varias cosas. Hasta el cierre de esta edición, la investigación por los hechos vandálicos no tenía un rumbo claro.
“Nos preguntaron si tenemos algún indicio de por qué puede haber pasado esto y no sabemos”, indicó Gersani en el programa Fuerza Deportiva. “Tenemos una buena relación dentro de la institución, con la hinchada, que nos apoya en todo. Nos sentimos afectados por esto, da desgano, porque uno trata de hacer las cosas lo mejor posible, con total claridad para que estén conformes, y hoy nos encontramos con esto”, se lamentó, aún dolido y sobre todo confundido por los hechos.
“Esto va más allá de la rivalidad de hinchadas, para llegar a hacer esto y con el método de las bombas molotov hay que tener conocimiento de estas cosas, nos dijeron los peritos. Es alguien que sabe utilizar esto”, argumentó Gersani, que fue presidente y lleva más de diez años ligado al “Sagrado” de Piedra Blanca. “Hoy pasó esto y mañana puede pasar en la propiedad de uno”.

Los hinchas, no
Teniendo en cuenta lo acontecido en el Américo Tesorieri, donde los “hinchas” planearon maniobras para perjudicar a la institución ante la negativa de la dirigencia de comisión directiva de entregar entradas, Gersani dejó en claro lo siguiente: “Nosotros tenemos una excelente comunicación con los simpatizantes, pero ellos no tienen nada que ver, es más, se acercaron porque están molestos con esto también”.