Antes de la primera fecha era una de las dudas que el entrenador de Defensores de Esquiú mostraba. Pero David Defilippo se inclinó por él, por su juventud y despliegue, y Leandro Martínez Acosta no lo defraudó. Es una de las figuras del “Sagrado” en el Torneo del Interior 2013, y quien abrió el partido en el que su equipo derrotó a Coronel Daza el fin de semana para quedar a un solo paso de la siguiente ronda. “Nos falta un triunfo más, es un hecho la clasificación para nosotros”, dijo el mejor de los hermanos del equipo de Piedra Blanca.
“Esta semana tengo que ir al kinesiólogo, sí o sí. Este partido no lo tendría que haber jugado pero lo mismo me metí a la cancha”, le contó a El Esquiú.com “Leo”, quien tiene un golpe en su aductor izquierdo. “Ahora seguro paro, porque ya estamos casi clasificados”.
En el análisis del juego del sábado, el mediocampista no ahorró elogios para sus compañeros, especialmente para los defensores: “Estuvo lindo el partido, manejamos la pelota al comienzo, y cuando no la tuvimos la defensa nuestra estuvo muy bien, el chango ese Yepes (Rivera) se pasó. Los cuatro de atrás han andado muy bien”, explicó.
“Ganamos y es un hecho que estamos clasificados, necesitamos tres puntos más”.

El puesto

“El año pasado fue igual: comencé jugando yo, después me quitó el puesto Fabricio (Reyes), y de nuevo me quedé con el puesto. Hay una competencia muy sana, eso sí”, remarcó Martínez Acosta, que acompaña en el doble cinco del “Sagrado” a Naím Garnica.
Igual que todos en Piedra Blanca, la familia Martínez Acosta vive un “Sagrado” carnaval.