La noche en La Bombonera comenzó con un tinte emotivo y algo de nostalgia. La imagen de Riquelme con la diez en la espalda, acompañada por la de Carlos Bianchi en el banco de suplentes y el arbitraje de Carlos Amarilla trasladaba a los espectadores a la época más gloriosa de Boca en la Copa Libertadores.

El espectáculo tenía como único protagonista a Román. Todas las miradas estaban puestas en el enganche del “Xeneize”. Pero nadie advertía que Nacional cortaba todo el juego ofensivo del local y aprovechaba sus pocas oportunidades. A tal punto, que a los 19 minutos de la primera etapa Andrés Scotti anticipó al “Chiqui” Pérez en un córner y marcó el 1 a 0 para el conjunto uruguayo.

Con la desventaja el conjunto de la ribera se vio apurado y comenzó a llegar con más gente al área de Jorge Bava. La proyección de Clemente Rodríguez, los centros de Cristian Erbes y el manejo de Riquelme preocupaban a la última línea del visitante, que se limitaba al contragolpe para poder ampliar la diferencia.

Los minutos pasaban y Boca cada vez se acercaba más al empate. Antes del cierre del primer acto, el “Burrito” Martínez pudo llegar a la igualdad luego de una gran jugada individual que terminó abortando Bava. También Clemente Rodríguez tuvo una situación muy clara de gol y por su falta de conocimientos a la hora de definir, le regaló la pelota al arquero del “Bolso” y no quedó más remedio que ir al descanso con el sinsabor de la derrota.

En el complemento el partido fue muy trabado. Poco juego colectivo, escasez de ideas en ataque e insuficientes recursos para llegar a las áreas. La pelota parada era un argumento muy utilizado para meter mucha gente en el arco de enfrente y en uno de ellos Riquelme ejecutó un tiro libre venenoso que el “Chiqui” Pérez no pudo aprovechar y envió la pelota por encima del travesaño.

El ingreso del “Laucha” Acosta por Franco Sosa fue una clara muestra de desesperación por parte de Carlos Bianchi. Modificó la defensa, para conformarla con tres hombres e intentó llegar con más gente en el ataque. Pero la fórmula continuaba estando en el balón parado.

La inocente expulsión de Lembo, por un reclamo al árbitro impulsó anímicamente a Boca que, con el hervidero en las tribunas, no dejaba de presionar a un equipo que no salía de su propio campo.

Las cartas estaban jugadas y el “Virrey” continuaba desarmando a la defensa para meter más soldados que vayan al ataque. La salida de “Chiqui” Pérez por Nicolás Blandi fue la última chance del entrenador para lograr la paridad en su casa. Lo que nunca entendió el DT es que para atacar no hace falta llegar con una multitud al área visitante: lo que deben abundar son las idea.

Con esta derrota, el “Xeneize” llega a su segunda caída en lo que va de la Copa y se ubica tercero en el Grupo 1, con 3 puntos. Mientras que Nacional llega a la cima de la zona con 7 unidades. La revancha será la próxima semana en Montevideo .

Formaciones:

Boca: Agustín Orión; Franco Sosa, Claudio Pérez, Guillermo Burdisso, Clemente Rodríguez; Ribair Rodríguez, Cristian Erbes, Walter Erviti; Juan Román Riquelme; Juan Manuel Martínez y Lucas Viatri. DT: Carlos Bianchi.

Nacional (Uruguay): Jorge Bava; Andrés Scotti, Alejandro Lembo, Efraín Cortés, Christian Núñez; Adrián Romero; Israel Damonte, Santiago Romero, Juan Albín; Iván Alonso y Gonzalo Bueno. DT: Juan Carlos Bueno.

Árbitro: Carlos Amarilla (Paraguay)

Estadio: Alberto J. Armando (La Bombonera)