En Alemania, el Borussia Dortmund logró una hazaña ante el Málaga
El equipo alemán logró revertir un resultado adverso y se impuso 3 a 2 ante los de Manuel Pellegrini.La noche alemana se presentó con un aroma histórico. Luego del empate sin goles conseguido en La Rosaleda, muchos daban al conjunto andaluz como descartado para las semifinales de la Liga de Campeones de Europa.
Sin embargo, el antecedente de Manuel Pellegrini con el Villarreal y su notable experiencia en este tipo de compromisos hacían ilusionar a un grupo de jugadores que se destacan por su humildad, unidad y trabajo constante.
Tuvieron que pasar 25 minutos para que el sueño comience a convertirse en realidad. Tras una gran jugada protagonizada por Julio Baptista e Isco, Joaquín amagó desde el borde del área grande y con un remate rasante impuso el 1 a 0. Un gol que se convirtió en Dortmund, pero su grito llegó hasta Andalucía.
La fiesta era completa, pero los alemanes demostraron su potencial. Marco Reus logró una asistencia perfecta con el taco para Robert Lewandowski, quien luego de eludir a Wilfredo Caballero marcó el empate. El 1 a 1 seguía favoreciendo al equipo español, pero su ventaja ya era mínima.
En el inicio del complemento Lewandowski tuvo su oportunidad para aventajar al Borussia, pero esta vez Wilfredo Caballero se quedó con el mano a mano ante el atacante polaco. En respuesta, el Málaga también generó su ocasión mediante un gran trabajo en la pelota parada: tras un centro de Isco, Martín Demichelis asistió a Joaquín, quien impactó un cabezazo que tenía destino de gol. Pero Roman Weidenfeller se lució enviando la pelota al córner. El arquero demostró que dos cabezazos en el área no siempre terminan en gol.
Cuando faltaban 15 minutos para el cierre del partido, los corazones albiceleste dejaron de latir. El polaco B?aszczykowski desbordó por el sector derecho y con un centro hacia atrás Marcos Reus fusiló Caballero. Muchos gritaron el gol, pero otros se dieron cuenta de que “Willy” logró desviar el disparo para mantener la paridad y la clasificación. El arquero argentino volvía a convertirse en la figura de un espectáculo no apto para cardíacos.
El sufrimiento era desmesurado para un equipo que con uñas y dientes defendía la mínima diferencia que le permitía meterse entre los cuatro mejores de Europa. Con el afán de conseguir la hazaña Julio Baptista logró escaparse de la última línea alemana, y cuando quedó frente a Weidenfeller definió cruzado. Como el remate se iba desviado, tuvo que aparecer Eliseu para corregir el trayecto de la pelota y marcar el 2 a 1. La posición adelantada del portugués no fue percibida por el árbitro asistente Derek Rose y la historia estaba en la palma de la mano.
Pero como todo equipo alemán, su espíritu nunca es derrotado y, con potencia y mucho amor propio, comenzó a encerrar al Málaga en el área de Wilfredo Caballero. El tiempo estaba cumplido y el Borussia tenía que convertir dos goles para clasificar a las semifinales. Marco Reus a los 46 del segundo tiempo y Felipe Santana a los 48 pusieron cifras definitivas para un encuentro que no dio lugar a la razón. Cuando parecía que Manuel Pellegrini iba a conseguir clasificar al Málaga entre los mejores de Europa, los alemanes le arrebataron el pasaje a la siguiente fase en las últimas acciones del juego. Sin dudas fue un partido histórico que permanecerá en la memoria de muchos. Sea por el dolor que ocasionó la derrota o por la felicidad inmensa que generó la hazaña. En Dortmund la fiesta es con cerveza, porque el Borussia continúa invicto en el certamen y sueña con llegar a Wembley el 25 de mayo, cuando se dispute la final de la Champions League.