Resolvió rápido, como en sus días de jugador, aunque no fueron definiciones contundentes, como las que acostumbraba cuando usaba la camiseta N° 9. Lanzó una mirada esperanzadora, aunque la situación no es la que imaginó. Prefirió no alterar el orden, irritar a los dirigentes ni apuntarle al presidente Daniel Passarella por la falta de resolución en las negociaciones por los refuerzos , pero se lo observó sin la habitual picardía con la que viste al mensaje. En el regreso a los entrenamientos, Ramón Díaz contabilizó a 24 futbolistas, uno menos que los que integraban la lista que dejó antes de tomarse las vacaciones. Sin caras nuevas, aunque le susurran al oído qué detalles separan a Osmar Ferreyra, Carlos Carbonero e Iván Pillud; dolido por no ver a Cristian Ledesma, que todavía no renovó el contrato; incómodo por tener que repetir las explicaciones por desafectar a David Trezeguet, y apenado por la respuesta de Martín Demichelis -desestimó la propuesta-, el técnico riojano puso en marcha la pretemporada para afrontar un exigente semestre, con el torneo y la Copa Sudamericana como objetivos.

Prudente, alejado de las frases altisonantes, Ramón remarcó su tarea al frente del equipo y maquilló las críticas ante las ausencias. "Cumplimos con las expectativas que había, las superamos. Los refuerzos no son caprichos, creo que el equipo los necesita. Fue lo que hablamos cuando se terminó la temporada y ellos [los dirigentes] estuvieron de acuerdo", explicó el Pelado , que con una tensa calma espera el retorno de Passarella, que en Europa negocia las ventas de Rogelio Funes Mori y el colombiano Eder Álvarez Balanta.

El pedido de Ramón es concreto y le marca el pulso al Káiser, que al asumir expresó que en River se terminaban los jugadores falopas . "Comprar jugadores que no tengan las características de River no sirve. Los que vengan tienen que triunfar, lo demostramos con Vangioni e Iturbe", comentó, y se enseñó contento con la posibilidad de que el delantero de Porto juegue otros seis meses en Núñez.

¿Quiénes son los jugadores que pueden darle el salto de jerarquía? Jonathan Fabbro, un anhelo; Teo Gutiérrez , una apuesta de riesgo. Por el enganche de Cerro Porteño la entidad paraguaya pretende que River ceda a préstamo a Adalberto Román y abone 400.000 dólares por la cesión por una temporada. La cifra se ajusta a la economía y dista de los US$ 4.000.000 que pidieron los guaraníes en el mercado de verano, cuando sólo aceptaban una transferencia. Aquí, el impedimento es del DT, que desea que el zaguero se quede en el plantel. Por el atacante colombiano de Cruz Azul, Ramón explicó: "Está entusiasmado, pero hay temas contractuales que resolver". El monto que solicita el club mexicano asusta en Núñez.

La situación de Ledesma lo incomoda, pero no quiere generar alboroto y, con mesura, declara. "Se quiere quedar, pero depende de un tema económico y en eso yo no me meto", señaló. El Lobo pide una actualización del contrato y las tratativas están estancadas.

Fe, calma y tranquilidad pretendió exhibir Ramón Díaz en la vuelta a las prácticas de River. El técnico no tiene respuestas, y las espera.