Racing vive horas muy especiales desde el sábado pasado, cuando dio cuenta de su clásico rival, Independiente, como visitante, y aprovechando la caída sufrida el domingo a la noche por Defensa y Justicia a manos de Boca Juniors, se quedó con la exclusividad de la punta de la Superliga, mientras palpita el encuentro del miércoles como local ante Corinthians, por la Sudamericana, al que llega con la ventaja de haber anotado de visitante.

Luego de la tormenta desatada hace poco más de dos semanas entre el delantero Ricardo Centurión y el entrenador Eduardo Coudet en la caída 2-0 ante River, y con mal desempeño incluido, Racing transita horas de tranquilidad. 

El episodio entre Centurión y Coudet abrió un interrogante dentro del mundillo “albiceleste”: saber cómo le iba a responder el plantel al entrenador tras la decisión de separar del grupo al futbolista, debido al empujón al entrenador antes de ingresar en el clásico frente a River. 

Con este panorama, los futbolistas desactivaron la bomba mediática y le respondieron a Coudet de la mejor manera: con un rendimiento superlativo desde lo futbolístico en el empate 1-1 ante Corinthians, por la ida de la primera fase de la Copa Sudamericana. 

El buen desempeño del equipo y el resultado positivo conseguido en Brasil le permitió al técnico preparar más relajado el partido como local ante Godoy Cruz sabiendo que la gente de Racing se iba a expresar a favor o en contra por el tema Centurión y por la dura caída en el Monumental. 

A pesar de la presión que se vivió en la previa al choque ante el “Tomba”, el público estuvo ajeno al episodio entre Coudet y Centurión, y además el equipo volvió a responder con contundencia y a dar una lección de carácter con un 3-0 a favor que pudo haber sido más amplio. 

No obstante, el momento más importante de la noche fue luego de la apertura del marcador, cuando el goleador Lisandro López le dedicó su tanto al entrenador con un fuerte abrazo, en un claro mensaje de apoyo tras la semana conflictiva que se había vivido en el club. 

“Licha” López, máxima figura y referente del plantel, marcaba así las bases para la “refundación” del equipo tras el traspié de Núñez y de cara al tramo final del torneo, justamente en la semana previa al clásico de barrio ante Independiente. 

La “Academia” de Eduardo Coudet y Lisandro López tiene todo a su favor para seguir por el buen camino de cara a los próximos compromisos, y sabiendo, sobre todas las cosas, que depende de sí misma para poder darle una alegría a su gente.