La denuncia fue radicada en la Unidad Judicial N° 10 de Villa Dolores, Valle Viejo, el mismo viernes del partido en el Primo A. Prevedello, y el juez Silcán Jerez asentó los hechos.

Sobre los 14 minutos del segundo tiempo, cuando Maximiliano Silcán Jerez cobró un penal a favor de Los Sureños, la situación fue muy discutida por todo el Xeneize, sobre todo por Daniel Molina, que estalló en bronca cuando al árbitro, decidió mostrarle la segunda amarilla y posterior roja. El jugador tuvo que ser retirado por sus compañeros mientras vociferaba con agravios, realizaba gestos intimidantes y hasta escupió la cara del réferi. Todo esto se dio ante la atónita mirada de propios y extraños. 
A la vez, en la denuncia el árbitro hace referencia a que recibió amenazas por parte de Molina, por lo cual decidió presentar la demanda correspondiente.

Antecedentes

Molina ya tuvo una sanción disciplinaria por la expulsión sufrida ante La Tercena, en la primera fecha del Torneo Apertura de Primera A, donde además se dio su indebida inclusión. Molina había sido expulsado como entrenador de Inferiores el día anterior. 
Esto llevó a la correspondiente protesta del “Verde” de Fray Mamerto Esquiú, que se quedó con los puntos tras el dictamen del Tribunal de Disciplina de la Liga Chacarera de Fútbol. 
Todo esto nuevamente queda en manos del cuerpo disciplinario chacarero.