Barcelona, demasiado falto de ritmo y de ideas, arrancó la pretemporada con una derrota por 2-1 ante el Chelsea, en un amistoso disputado en Saitama (Japón) donde debutaron Antoine Griezmann y Frenkie De Jong y en el que los juveniles aportaron los mejores destellos del bando culé.

Ernesto Valverde situó a Griezmann como delantero junto a Dembélé, en un once inicial donde el centro del campo lo formaban los canteranos Riqui Puig, Álex Collado y Sergi Roberto junto a Sergio Busquets.

Valverde dispuso otro once en la segunda parte con las novedades destacadas en ataque de De Jong, Malcom y Carles Pérez, este último muy activo y responsable de los primeros acercamientos a meta del Barça junto al también canterano Aleñá. El técnico de la escuadra londinense, Frank Lampard, también fue modificando progresivamente su alineación dando entrada a Giraud, Marcos Alonso y Batshuayi, entre otros cambios.