La noticia de la mañana en el predio de Boca en Ezeiza fue la salida en su auto particular de Daniele de Rossi. El italiano dejó la práctica vestido de civil y se supo que es porque ya no seguirá en el club.

Desde la salida de Gustavo Alfaro y Nicolás Burdisso, la continuidad del histórico volante de la Roma empezó a ser puesta en duda.
De Rossi apenas participó en siete partidos en el último semestre en La Ribera. Una inoportuna lesión tras el superclásico por la Superliga lo mantuvo alejado de las canchas durante más de un mes y después de eso nunca logró recuperar su lugar.
Por la tarde en una conferencia de prensa junto al presidente Ameal, el italiano se despidió y explicó los motivos de su salida
“Tengo la necesidad de acercarme a mi hija mayor”, afirmó. Además, contó que la nueva dirigencia intentó convencerlo para que siguiera, se refirió a su futuro y se mostró agradecido. “Quizá nuestros destinos nos vuelvan a juntar”, manifestó.

Russo pide refuerzos
El retiro de Daniele De Rossi y la convocatoria de Nicolás Capaldo a la Selección Sub 23 obligan al Xeneize a buscar reemplazantes. Mucho más si se tiene en cuenta que el juvenil, que participará del Preolímpico de Colombia y se perderá cuatro de los siete partidos restantes de la Superliga.

Russo no apuntarían a un 5 clásico sino que buscarían un volante mixto, alguien que colabore con la contención pero también pueda aportar en el juego. En ese sector de la cancha el DT contará (hasta el regreso de Capaldo) con Iván Marcone, Agustín Almendra y Jorman Campuzano. El tema de Paolo Guerrero debería solucionarse en los próximos días.