En la mañana de ayer, personas relacionadas con la actividad del turf catamarqueño, se movilizaron frente a Casa de Gobierno para que los vuelvan a habilitar.

La concentración se llevó a cabo en la avenida Alem y calle República, donde marcharon por las calles céntricas hasta la plaza 25 de Mayo.

Cuando llegaron frente a Casa de Gobierno, fueron recibidos por el funcionario provincial Raúl Moya, comentó Javier Maza, uno de los organizadores de carreras.

Del encuentro salieron conformes porque el COE analizará el pedido y se irá a supervisar las canchas para un pronto regreso.

El banderazo fue para pedir que se autorice la reapertura de las carreras cuadreras, ya que 500 familias viven de la actividad, entre ellas; criadores, jockey, aprendices, peones, entrenadores, productores de cereales y pasturas, herreros, veterinarios, comerciantes de subproductos veterinarios y de implementos de talabartería y arneses, personal gastronómico, sanitarios, administrativos, autoridades de pistas, periodistas y fotógrafos.

Los organizadores apuntan que es una disciplina deportiva que se realiza al aire libre, en un predio de más de 5 hectáreas, con una pista de 400 y 800 metros.

En las tribunas se efectuará el distanciamiento social para el público presente.

Los bares estarán abiertos con el protocolo de distanciamiento y el personal estará con barbijo y máscara de seguridad.

Se realizará la desinfección en la cancha con sanitizantes y los vehículos también serán desinfectados al ingreso de la playa de estacionamiento.

Las apuestas serán por sistema de remates con un máximo de dos palcos. Por ejemplo; el primero en la apuesta será para el propietario o allegado al ejemplar, con un representante de cada uno que realizará las apuestas del grupo, guardando el resto el distanciamiento social.

Por su parte, los festejos para los propietarios y la barra ganadora tendrán que tener distanciamiento y las fotos solo serán con el ejemplar, el jockey y cuatro personas con un metro de distanciamiento.

En el protocolo presentado solicitan un evento con 14 días entre uno y otro, considerando el ciclo evolutivo del virus.
El control será a cargo del personal policial  que será contratado por los organizadores de cada carrera.