Boca, que en algún momento amagó con pelearle el campeonato a River, se desinfló por completo antes de tiempo y terminó de despedirse ayer de la batalla, a pesar de que quedan todavía seis fechas por jugarse.

Muy débil, en ataque y en defensa, el equipo de Sebastián Battaglia no estuvo a la altura de las circunstancias y cayó otra vez derrotado.

Esta vez el verdugo fue Gimnasia de La Plata, al que le alcanzó con un gol de Luis Miguel Rodríguez a poco de iniciarse el partido para quedarse con todo.

El “Pulga” anotó de penal con su clase habitual, luego de un error del arquero Agustín Rossi que derivó en la sanción de la pena máxima.

A pesar de jugar gran parte del partido con un hombre más, por la expulsión de Brahian Aleman en el “Lobo”, Boca se repitió en intentos impotentes una y otra vez, sin ideas, sin convicción y sin fútbol.

Ahora los xeneizes quedaron a 12 lejanos puntos del River de Marcelo Gallardo, que podría estirar la diferencia a 15 puntos si hoy el millonario vence a Estudiantes.

Al cabo fue la quinta caída de Boca en el certamen, donde no tiene ya nada que discutir, y sumado a la temprana eliminación en la Copa Libertadores, completa otro año bastante opaco, que le deja como único objetivo la Copa Argentina.

Boca volverá a jugar el lunes 8 de noviembre ante Aldosivi, y luego lo esperan Sarmiento, Independiente, Newell’s, Arsenal y Central Córdoba.

Era un fixture accesible para el cierre de torneo que ilusionada a los hinchas, pero el equipo llegará a esa instancia ya sin chances de competir por el título.