El Rojo de Avellaneda llegaba al Libertadores de América con la obligación de ganar al igual que Colón. Los dos equipos no atraviesan un buen momento y buscaban mejorar su actualidad. Ante este panorama, los dos se vieron las caras en el estadio de Independiente. El encuentro terminó en empate en un encuentro entretenido con tres penales y una definición que se vivió hasta el último minuto. 

El marcador lo abrió el elenco de Santa Fe gracias a Santiago Pierotti. Sin embargo, luego de un polémico penal, Martín Cauteruccio empató para el Rojo. Ya en el complemento se vivió una escena nunca antes vista en nuestro fútbol. Paolo Goltz, a los 80', tocó la pelota con la mano dentro del área luego de que el arquero Chicco la pusiera en juego en forma reglamentaria. Lamolina, en principio, no lo observó y acertadamente el juez de línea, Ariel Scime, se lo informó. El juez principal pitó penal otra vez para el Rojo y Matías Giménez Rojas lo transformó en el 2-1 parcial.

Cuando el partido se moría, Lamolina volvió a sancionar un penal pero ahora para Colón luego de un agarrón de Baltasar Barcia sobre Ramón Ábila. "Wanchope" se hizo cargo de la ejecución y anotó el empate final en el rebote ya que Rodrigo Rey contuvo el tiro desde los doce pasos.

Si bien Leandro Stillitano, técnico del Rojo, debía ganar para alejar fantasmas de una posible renuncia o despedida, este empate le da una chance más al entrenador de Independiente y la próxima prueba de fuego será el domingo 26 de marzo ante Bolivar, por los 32avos de la Copa Argentina.