Un cimbronazo sacudió este martes el mundo Boca Juniors. A tan solo dos días de la dolorosa derrota en el Superclásico frente a River Plate, la dirigencia del club de la Ribera confirmó la salida de Fernando Gago como director técnico del primer equipo.

La noticia, que comenzó a circular con fuerza en las primeras horas de la mañana, fue oficializada por Chicho Serna ante periodistas. Si bien no hubo un comunicado formal por parte del club, la decisión ya fue tomada y comunicada al propio Gago, quien ya se despidió del plantel.

"HEMOS TOMADO UNA DECISIÓN: HASTA ACÁ HA LLEGADO FERNANDO GAGO CON BOCA"

??? Chicho Serna

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— SportsCenter (@SC_ESPN) April 29, 2025

La caída por la mínima diferencia ante su eterno rival en el Monumental habría sido el detonante final para una relación que ya venía mostrando signos de desgaste en las últimas semanas, a pesar de haber alcanzado la final de la Copa Libertadores en la temporada anterior.

Gago, quien asumió el mando del equipo a fines del 2024, deja el cargo tras un par de derrotas doloras, como la eliminación de la clasificación a la Copa Libertadores luego de perder contra Alianza Lima. Su ciclo estuvo marcado por un estilo de juego ofensivo y ambicioso, que si bien generó momentos de brillantez, también adoleció de inconsistencia y fragilidad defensiva en partidos clave.

La derrota en el clásico, el partido más importante para la hinchada xeneize, habría pesado demasiado en la balanza de la dirigencia, que busca un revulsivo para enderezar el rumbo del equipo en el torneo local y, de cara al futuro, en las competiciones internacionales.

Ahora, la gran incógnita pasa por conocer quién será el encargado de tomar las riendas de un vestuario golpeado y de un club que necesita urgentemente recuperar la moral y la senda del triunfo. Suenan varios nombres en el ambiente futbolístico, desde técnicos con experiencia en el club hasta opciones sorpresivas.

La salida de Gago abre un nuevo capítulo en la historia reciente de Boca Juniors, un club acostumbrado a vivir las pasiones al límite y donde cada resultado tiene un impacto profundo en su fervorosa hinchada. El tiempo dirá quién será el elegido para conducir este barco en aguas turbulentas.