Editorial

Lo que deja Irak

Ante el retiro de las últimas tropas norteamericanas.
jueves, 19 de agosto de 2010 00:00
jueves, 19 de agosto de 2010 00:00

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, retiró de Irak las últimas tropas de combate. Curiosamente, la noticia pasó casi desapercibida en los medios de comunicación, los mismos que una década atrás hicieron de la guerra en Irak el acontecimiento del siglo.
La persecución de Osama Bin Laden, la caza de Saddam Hussein, la captura de los talibanes huídos de Afganistán, la liberación del pueblo oprimido, fueron algunas de las muchas excusas utilizadas para justificar la invasión norteamericana, que como telón de fondo siempre tuvo el control exclusivo de las reservas petroleras de la región.
En el medio, la sangre derramada dejó de ser una noticia interesante para la prensa internacional. No hay manera de recordar cuántos atentados se sucedieron en Bagdag, ni cuántas vidas humanas se perdieron entre ataques de los aliados, de los rebeldes, de los fundamentalistas...
Para Estados Unidos, los números son un poco más claros. Oficialmente se admitieron 4.400 bajas de soldados norteamericanos en suelo iraquí. Entre ellos, centenares de latinos que aceptaron ofrendar todo lo que tenían a cambio de un sueldo y una visa de residencia.
George Bush, padre e hijo, descansan con los honores de haber ocupado el sillón más importante de la Casa Blanca. Hussein fue ejecutado y Bin Laden... sabe Alá dónde está.
Estados Unidos anunció el fin de los combates en Irak. Miles de familias destruidas y niños mutilados, continuarán sufriendo las consecuencias del modo más absurdo de hacer negocios: la guerra.
La humanidad entera lo sabe, pero por alguna razón la lección jamás se aprende. A menos que alguien pueda pensar, todavía, que tanto horror vale la pena.

Comentarios

Otras Noticias