Termina 2012 y no habrá novedades salariales hasta el próximo año, cuando se reinicie el estudio de un aumento para la Administración Pública. Desde la cartera de Hacienda recordaron que aunque hubo un leve repunte de las finanzas, producto de una mayor coparticipación de impuestos, hay demasiados compromisos como para cargar el costo de otra mejora en los sueldos. También se anunció para 2013 la revisión de todo el sistema de adicionales e “incentivos” que se pagan en reparticiones provinciales, a fin de equilibrar los desfasajes existentes.
Si esto finalmente se lleva a cabo, el Gobierno avanzará con una medida concreta tendiente a corregir un sistema injusto, que se arrastra desde hace años. Los distintos plus salariales que hay en dependencias como Rentas, Capresca o el Instituto Provincial de la Vivienda, han generado situaciones como que un administrativo con categoría baja que recién se inicia en el IPV, cobre una cifra mensual superior a un médico del hospital San Juan Bautista con diez años de antigüedad. A principios de septiembre, y en medio de la polémica por el adicional por “tareas específicas” del organismo que conduce Dante López Rodríguez, salieron a la luz pública los elevados sueldos que se pagan, algunos de los cuales superan los 15.000 pesos. Esto motivó los lógicos reclamos desde otras reparticiones, que demandan si no la actualización de sus adicionales, la implementación de uno propio.
Hay que recordar que estas gangas que disfrutan unos pocos cientos de privilegiados dentro de la estructura administrativa provincial, no son por alguna tarea extra, sino que es producto del reparto de fondos ingresados, ya que se trata de entes recaudadores. Esto no hace sino más injusto el trato con respecto a los agentes de otros organismos, que no reciben de este trato especial.
Por eso es imprescindible que las autoridades implementen correctivos para nivelar los salarios y eviten la continuidad de cobros claramente discriminatorios.