Cuando promediaba el siglo pasado comenzaron a surgir festivales folclóricos en distintas ciudades del país, acompañados de ferias y exposiciones, con el objetivo de promover la cultura local, mostrando a los visitantes sus características propias, lo que los convirtió en grandes atractivos turísticos.
Poco a poco fueron surgiendo nuevos festivales hasta llegar a realizarse tantos, que fueron debilitando la novedad inicial, de modo que sólo algunos permanecieron como emblemáticos, en la multiplicidad de ofertas de este tipo.
Entre los festivales más reconocidos del país y que tiene características de Nacional e Internacional, está “El Poncho” como es nombrado sucintamente por propios y extraños; forma parte de la agenda de los mismos catamarqueños que viven dentro y fuera de la provincia, como también de un alto porcentaje de argentinos.
Pero, cada vez que concluye una edición de nuestra fiesta folclórica mayor, se escuchan reclamos de artistas, artesanos, prestadores de servicios gastronómicos y del público en general por fallas diversas: precios, modos de atención, higiene, ausencia de público en propuestas alternativas, etc. Aún así, prevalecen los elogios sobre las lamentaciones.
El hecho de que sean más los logros que las fallas, no es razón para que no se revisen éstas para evitarlas en la siguiente realización.
Por eso son válidos todos los aportes, sugerencias y propuestas, aunque sólo faltan dos meses para la nueva edición. Seguramente algunas estarán teñidas de un interés personal o sectorial, pero aún así serán legítimas si están desprovistas de mezquindad.
Y para próximas ediciones, los organizadores podrán abrir nuevos canales de participación, no sólo a artistas o artesanos, sino al público que puntualmente está presente en este acontecimiento, así habla de su experiencia y canaliza sus inquietudes. Quizás sean necesarias jornadas, talleres u otras formas de debate para que se optimice su organización y nuestra Fiesta del Poncho sea un atractivo renovado en cada edición y convoque a un mayor número de turistas.