El cierre de alianzas para las PASO (primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias), la interna nacional del 11 de agosto destinada a preseleccionar a los candidatos de octubre, trajo novedades, confirmaciones y, si se quiere, alguna sorpresa. La novedad fue la inclusión de un condimento peronista dentro de la alianza Frente Cívico y Social que estructuraron los radicales y terminaron de definir en tiempo de descuento. También se confirmó el pacto Oscar Castillo-Mauricio Macri-Luis Barrionuevo que supimos adelantar hace ocho meses y, entre las sorpresas, la principal fue la participación del gremialista Hugo Melo dentro de la alianza radical. De ahora en más, y en base a las presentaciones realizadas entre el miércoles y las primeras horas del jueves, la expectativa va a girar en torno a la nominación de candidatos y a eventuales confrontaciones que, entre ellos, puedan darse dentro de esta interna que, por ley de la Nación, instauró el kirchnerismo a partir de 2011.
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El kirchnerismo cerró los trámites formales antes que ningún otra alianza. Confirmó el gran acuerdo Frente para la Victoria-PJ que había quedado sellado en el congreso “peruca” del sábado 8 de junio y que, hasta ahora, ha dado excelentes resultados electorales. Nadie parece moverse del esquema que conduce Lucía Corpacci y que, por múltiples razones, es favorito para alzarse con la victoria. La única pregunta que queda por responder es si algún rebelde se animará a anotarse y competir con los candidatos oficiales el domingo 11 de agosto. La posibilidad no puede ser descartada. Es difícil, pero existe. En cuanto al nombre del candidato del gobierno las especulaciones van reduciendo a los posibles postulantes. A solo seis días del cierre de listas, Jorge Moreno y Gustavo Aguirre suenan fuerte, aunque no se descarta algún “tapadito” (o “tapadita”) que pueda responder en un ciento por ciento a Lucía Corpacci, al fin y al cabo la encargada de dar la puntada final a la costura electoral que se pueda enhebrar con la Casa Rosada.
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El Frente Cívico, hay que ser justos, presentó una alianza decorosa. Si bien ya no cuenta con la multitud de sellos que supo ostentar en otras épocas (en 2011, sin ir demasiado lejos), se las arregló para compensar la falta de acuerdos de cabotaje con aportes nacionales que, al menos en las cuestiones formales, lo fortifican. Por ejemplo, va a pregonar el entendimiento con el macrismo, con el partido del “Momo” Venegas (a través de Miryam Juárez) y con lo que pueda representar Hugo Melo como exponente del sector sindical. ¿Esto significa un aporte peronista al Frente Cívico y Social? Quizá sí, aunque no haya garantía de votos. En más, el radicalismo mantiene los aliados locales Movilización y Socialismo, que tampoco suman adhesiones de importancia en términos electorales. De esta manera, como siempre, la esperanza se asienta en el voto radical. Aquí el interrogante post alianza tiene que ver con lo que la dupla Castillo-Brizuela del Moral pueda, a la hora de las candidaturas, otorgar a sus aliados. Esa puede ser la chispa que origine algún incendio. Veremos qué pasa en la semana previa a la determinación de los candidatos nacionales. Todos aseguran que será Brizuela del Moral, pero todavía se discute si conviene jugar así en esta instancia. Por las dudas, hay alternativas como el exintendente Ricardo Guzmán, mientras que en el frente interno se habla de postulantes que precalientan el ambiente en pleno invierno. ¿No se presentarán algunos de ellos contra el candidato oficial y del consenso?
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El acuerdo Macri-Castillo-Barrionuevo ha sido confirmado a este “Secretario” desde las entrañas mismas del radicalismo. Con el macrismo, el entendimiento es explícito. El sector del expresidente de Boca (vino y compartió con los correligionarios en noviembre de 2012) figura en la alianza y con Barrionuevo, que irá por su lado, la correspondencia será logística (afiches, votos, fiscales, etc.). Aparte de que en la alianza que presentó el gastronómico figura el partido de Pedro Rodolfo “Peter” Casas, un incondicional de Oscar Castillo que, afirman, únicamente pudo haberse acercado a Barrionuevo, a quien impugnó la residencia en el 2003 y le privó de ser gobernador, por consejo del propio senador nacional.
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Al haber terminado “la rosca” de las alianzas, que sirven para marcar los derroteros del futuro, el interés mayor tiene que ver con los candidatos. Esta será la última semana de deliberaciones ya que, a la medianoche del sábado 22, se acaba el plazo. Los que parecen estar seguros de ir a la disputa por los votos son Eduardo Brizuela del Moral (Frente Cívico) y José Luis Barrionuevo (Tercera Posición), en tanto la duda superlativa tiene que ver con el Frente de la Victoria que, un mes atrás, aseguró que su representante se conocerá casi al cierre de las listas. Por ahora todos son rumores y lo único que se hace, en términos concretos, es fortificar la unidad, sumando como sea a aquellos que puedan sentirse molestos. Por último, no se descartan sorpresas ajenas a los tres principales frentes. Son varios los radicales que quieren disputar dentro de las PASO la interna que le negaron Oscar Castillo y Brizuela del Moral. Y en el peronismo, al menos en las paredes, sigue inscripto el nombre de Ramón Eduardo Saadi. ¿Se presentará con el MAP, el sello con el que estuvo a punto de recuperar la gobernación en 1991 y con el que consiguió las diputaciones de Oscar Garbe y Pilar Kent en 2005? ¿Podrá ser él, finalmente, el candidato o la anotará a su mujer? ¿O acaso la amenaza de meterse en la pelea solamente está orientada a negociar con la conducción gubernamental de Lucía?
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Una buena para El Ancasti. Hace una semana, en un artículo de opinión, remarcó que la conducción del Frente para la Victoria-PJ en la ciudad de Andalgalá por parte del senador José Perea, sintetizaba una gran contradicción con el proyecto minero. Es que, con razón, entendía el diario que el exintendente dilapidó sin contemplaciones la renta minera a la que, casualmente, el gobierno pretende asegurar en obras de importancia a través de la reglamentación del uso de las regalías. Este discurso fue el que empleó dos días después el senador Víctor Luna al visitar la “Perla del Oeste”. A la hora de criticar a su par José Perea utilizó casi textualmente el discurso del medio de prensa. ¿No habrá estado leyendo el diario al momento de realizar las declaraciones? Todo puede ser con la línea de inteligencia que se ha establecido entre los senadores y algunos medios.
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RECUERDOS HACIA EL PRESENTE. Como lo hacemos todos los domingos, finalizamos los Apuntes del Secretario con el repaso de hechos políticos ocurridos hace 25 años y que, por nombres y circunstancias, pueden tener relación con el presente.
El 14 de junio de 1988, Ramón Saadi, cuarta autoridad de la Cámara de Senadores de la Nación, presenta un proyecto para modificar la ley del Servicio Militar Obligatorio. Básicamente, la iniciativa tendía a la profesionalización de las fuerzas armadas. El exgobernador las dividía en tres categorías: la primera de ellas mantenía el statu quo que existía en aquel momento; la segunda permitía el ingreso de estudiantes y trabajadores idóneos para conformar los recursos civiles dentro de las fuerzas y la tercera tenía que ver exclusivamente con la aptitud militar. Se trató de un proyecto de mucho valor para aquellos tiempos. Si bien no se aprobó, echó las bases para cuestiones trascendentes que iban a ocurrir durante el menemismo, cuando fue eliminado el servicio obligatorio. En este sentido, hay que aclarar que el detonante de la medida tomada por el presidente nacido en La Rioja fue la muerte del soldado Omar Carrasco, ocurrida en la unidad militar de Zapala (Neuquén).
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También en junio del ‘88 se comunica oficialmente que 38.431 catamarqueños están habilitados para votar en la interna peronista -por la candidatura presidencial- que se iba a llevar el día 8 de julio. Como se sabe, en esa fecha compitieron las fórmulas Menem-Duhalde y Cafiero-De la Sota. La Junta Electoral de aquella histórica contienda en la que Catamarca tuvo un gran protagonismo, estuvo integrada por representantes locales. Fueron ellos el extinto Ángel Arturo “El Gordo” Luque y el exdiputado provincial Víctor Hugo Uriarte.